Hasta hace unos años, sólo existían opciones de tratamiento sintomático para los niños y adultos con atrofia muscular espinal (AME). Esto ha cambiado. Nuevas pruebas refuerzan que los pacientes adultos con 5q-SMA tratados con nusinersén pueden detener eficazmente la progresión natural de la enfermedad e incluso ganar nuevas funciones motoras. Además, también se observan mejoras en las funciones bulbar y respiratoria, lo que es especialmente importante para la calidad de vida de los pacientes afectados.
La atrofia muscular espinal asociada a 5q (5q-SMA) provoca una pérdida progresiva de motoneuronas [1,2]. El tratamiento con nusinersén puede frenar la creciente debilidad muscular y estabilizar o incluso mejorar las habilidades motoras. También pueden observarse éxitos terapéuticos clínicamente significativos en pacientes adultos con 5q-SMA de tipo 2 o 3, tal y como presentaron los expertos en un simposio de Biogen durante el 93º Congreso virtual de la DGN sobre la base de varios estudios observacionales [3,4].
Evolución natural de la enfermedad
En la AME de aparición más tardía (AME tipos 2 y 3), existe una debilidad muscular progresiva y una pérdida de la función motora en todos los grupos de edad [1,2]. La debilidad muscular progresiva y la pérdida de funciones motoras que la acompaña se muestran en la rutina clínica en el curso natural de la AME, entre otras cosas, de la siguiente manera:
- HFMSE*: Disminución de la puntuación HFMSE en 0,5 – 1,0 puntos al año[3].
- RULM**: Disminución de la puntuación RULM en 0,41 puntos por año [5].
- 6-MWD§: Disminución de la distancia caminada en 6 minutos en 20,8 metros (11-19 años) o 9,7 metros (≥20 años) al año [6].
Recientemente, se publicaron los resultados de un estudio a largo plazo (1989-2020) de 104 pacientes de AME no tratados, en el que se confirmó de nuevo la disminución continua de la fuerza muscular mediante mediciones con dinamómetro [2]. Se han medido aumentos significativos de la fuerza muscular en la infancia tanto para la AME tipo 2 como para la AME tipo 3. Sin embargo, una vez alcanzada la fuerza muscular máxima, ésta disminuyó de forma continua, lo que demuestra que los tipos 2 y 3 de AME son patrones de enfermedad degenerativa con una sintomatología de la enfermedad de aparición retardada. Estos resultados justifican el uso de terapias disponibles actualmente en pacientes adultos con AME para detener la pérdida continua de fuerza muscular y mejorar la independencia y la calidad de vida de los pacientes [2].
En otro estudio, también se observó una disfunción bulbar progresiva y una reducción de la apertura bucal en los pacientes con AME, dos parámetros que tienen un impacto especialmente elevado en la calidad de vida [7]. En esencia, los pacientes describen principalmente el deseo de mantener las habilidades que contribuyen a poder llevar una vida independiente. Entre ellas se incluyen, por ejemplo, la alimentación independiente, la higiene personal autónoma o el manejo del teclado de un ordenador, es decir, habilidades que permiten a los pacientes acceder al mercado laboral e interactuar con su entorno social [8].
Nusinersen en la vida cotidiana
Los objetivos de la terapia con nusinersén incluyen no sólo la conservación sino también la mejora de las funciones motoras para preservar la independencia social y económica de los pacientes con AME y permitir una influencia positiva en la calidad de vida. Estos efectos terapéuticos del nusinersén también se confirmaron en un estudio de 124 adolescentes y adultos con 5q-SMA. Además de la estabilización, esto demostró incluso una mejora en varias puntuaciones de la función motora [3].
Estos resultados están respaldados por un estudio de cohortes retrospectivo, independiente y de 14 meses de duración que evaluó la eficacia y la seguridad del nusinersén en adultos (n = 116; mediana de edad 34 años) con 5q-SMA tipo 2 o 3 genéticamente confirmado en 18 centros neurológicos de Italia: el nusinersén mejoró la puntuación HFMSE (aumento de la mediana) en 3 puntos (p = 0,0014) en los pacientes sedentarios y en 2 puntos (p = 0,00016) en los pacientes ambulatorios. En los pacientes con 5q-SMA tipo 3, se observó una mejora significativa en la puntuación RULM entre el inicio y el mes 14 (+0,5 puntos [intervalo: -6 a 6]; p = 0,012). La distancia caminada en 6 minutos mejoró en una mediana de 20 metros ([rango: -101 a 111]; p = 0,016). En los pacientes ambulatorios con 5q-SMA tipo 3, se observó un aumento significativo de la CVF‡ después de 14 meses (+7% [intervalo: +1 a 29]; p = 0,031 [9].
Los participantes en un estudio publicado recientemente informaron de mejoras subjetivas generales en términos de mayor amplitud de movimiento en los dedos y las manos; voz más alta; mejora del movimiento de la mandíbula y del habla, que iban en contra del curso natural de la disfunción bulbar progresiva [7].
Breve información técnica Spinraza
Literatura