En el marco de una colaboración internacional, el grupo de estudio REMAP-CAP está probando agentes conocidos en el tratamiento de la COVID-19. Sus resultados, publicados ahora en el New England Journal of Medicine, demuestran el beneficio de los anticuerpos monoclonales además de los preparados de cortisona para los pacientes gravemente enfermos.
El grupo de estudio REMAP-CAP es una asociación de unidades de cuidados intensivos de 14 países de Europa, Canadá, EE.UU., Australia, Nueva Zelanda y Arabia Saudí, creada por médicos de cuidados intensivos e infectólogos. En el marco de esta colaboración mundial única, el grupo está llevando a cabo ensayos clínicos aleatorios en un estudio internacional en curso de plataforma adaptativa multifactorial para evaluar la eficacia de los fármacos conocidos en la pandemia de COVID-19. La participación en el estudio en Alemania, que actualmente consta de 25 unidades de cuidados intensivos, se coordina en el Centro de Estudios Clínicos del Hospital Universitario de Jena (UKJ).
En un artículo publicado ahora en el New England Journal of Medicine, los médicos informan sobre un estudio en el que se probó el uso de anticuerpos monoclonales en la enfermedad COVID-19 con un curso muy grave. Los principios activos tocilizumab y sarilumab se utilizan desde hace años en la artritis reumatoide. Bloquean el receptor de la interleucina-6, un mensajero inmunitario que favorece la inflamación. De este modo, según la hipótesis del estudio, podría aliviarse la respuesta inflamatoria que daña los órganos. Esta suposición fue confirmada por el ensayo controlado aleatorio con 800 pacientes de cuidados intensivos, el 70% de los cuales recibieron respiración artificial.
La mitad de los pacientes recibieron los fármacos del estudio en el plazo de un día tras haberse hecho necesario el apoyo a la función orgánica. “Como resultado, estos pacientes necesitaron diez días menos de soporte orgánico que el grupo de control, y el riesgo de morir también se redujo en una cuarta parte”, resume Frank Brunkhorst el resultado. El director del centro de estudios y catedrático para la investigación clínica de la sepsis en la UKJ es corresponsable del diseño y los protocolos de los estudios REMAP-CAP como miembro del grupo directivo global. “Además de los corticosteroides, esto nos proporciona un segundo grupo bien establecido y seguro de agentes cuyo uso ha demostrado ser eficaz en el tratamiento de cursos graves de COVID-19”. Los resultados del grupo de estudio británico RECOVERY, publicados recientemente como preimpresión, han confirmado de forma impresionante el beneficio del tocilizumab también en pacientes hospitalizados menos graves.
Publicación original:
REMAP-CAP Investigators: Interleukin-6 Receptor Antagonists in Critically Ill Patients with Covid-19, 25 de febrero de 2021, N Engl J Med 2021; DOI: 10.1056/NEJMoa2100433.