Los problemas cardiacos como la cardiopatía coronaria y la insuficiencia cardiaca se encuentran entre las complicaciones más comunes y peligrosas de la diabetes tipo 1. El riesgo de mortalidad aumenta considerablemente. Aunque esta relación es bien conocida, una gran parte de los afectados no se ajustan adecuadamente al valor objetivo de glucemia, hipertensión arterial y dislipidemia. Aquí se necesita una gestión eficaz de los riesgos.
La esperanza de vida de los pacientes con diabetes tipo 1 (DT1) ha aumentado significativamente a lo largo de los años gracias a la mejora de los regímenes de tratamiento. No obstante, la mortalidad por enfermedades cardiovasculares sigue siendo de dos a cuatro veces superior en comparación con la población general [1–3]. Una de las razones es que una gran parte de los afectados no alcanza los valores objetivo recomendados, no sólo en términos de glucemia, sino también de hipertensión arterial y dislipidemia [4]. Sin embargo, las complicaciones cardiovasculares en particular influyen en la morbilidad y la mortalidad (resumen 1) [5]. Varios mecanismos son responsables de ello, como los cambios macrovasculares. Cuando los niveles de glucosa en sangre son elevados, las proteínas se glicosilan. La estructura así alterada ya no puede cumplir plenamente su funcionalidad original. Como resultado, puede desarrollarse arteriosclerosis en los grandes vasos sanguíneos, con el conocido riesgo de cardiopatía coronaria. Además, las enfermedades cardiovasculares son más frecuentes en los pacientes con ET1 que sufren complicaciones microvasculares, como la retinopatía [6].
Los diferentes patomecanismos son responsables de una serie de cardiopatías y también pueden solaparse en algunos casos. Por lo tanto, está indicado un control metabólico estricto para reducir el riesgo. Según las directrices actuales, el valor objetivo de HbA1c debe ser inferior al 7,5% sin hipoglucemia grave [7]. En cuanto a la tensión arterial, se aplica un valor orientativo inferior a 140 mmHg sistólica y <85 mmHg diastólica [8]. Si el riesgo es elevado, actualmente se recomienda reducir el colesterol LDL por debajo de 70 mg/dl, ya que reducir el colesterol LDL en 30 mg/dl disminuye el riesgo relativo de enfermedad coronaria en aproximadamente un 30% [9].
Ahora, un estudio reciente pretende evaluar la prevalencia de los factores de riesgo de ECV y la inercia clínica en el tratamiento de la diabetes y los factores de riesgo de ECV en la DMT1 en diferentes grupos de edad y géneros. Para ello, se analizaron los datos de casi 50.000 pacientes con DT1 de Estados Unidos y Alemania y Austria.
La gestión del tratamiento es insuficiente
Los resultados mostraron que menos del 40% de los pacientes con T1D tenían un control glucémico óptimo y sólo el 20% de los adultos menores de 26 años recibían tratamiento para la hipertensión y la dislipidemia a pesar de las indicaciones terapéuticas. Sin embargo, el 30-40% de los pacientes no alcanzaron sus objetivos de presión arterial y lípidos. Una de las razones del infratratamiento de la hipertensión y la dislipidemia es la inercia clínica.
Hubo algunas diferencias en las características de los participantes entre los registros. Los pacientes de Estados Unidos tenían un IMC más elevado que los de Alemania/Austria. La prevalencia del sobrepeso y la obesidad está aumentando en la T1D en Estados Unidos. Sin embargo, un mayor IMC es un conocido factor de riesgo de ECV y se asocia a la resistencia a la insulina y a un control glucémico subóptimo.
El estudio subraya la necesidad de mejorar las estrategias de control de la diabetes y del riesgo cardiovascular. Por lo tanto, además de un control óptimo de la glucemia, también debe prestarse especial atención a la tensión arterial y a la dislipidemia, y tratarlas eficazmente si es necesario.
Literatura:
- Lind M, Svensson AM, Kosiborod M, et al: Control glucémico y exceso de mortalidad en la diabetes tipo 1. N Engl J Med. 2014; 371: 1972-1982.
- Rawshani A, Rawshani A, Franzen S, et al: Mortalidad y enfermedad cardiovascular en la diabetes tipo 1 y tipo 2. N Engl J Med. 2017; 376: 1407-1418.
- Miller RG, Mahajan HD, Costacou T, et al: Una estimación contemporánea de la mortalidad total y del riesgo de enfermedad cardiovascular en adultos jóvenes con diabetes tipo 1: el estudio epidemiológico de Pittsburgh sobre las complicaciones de la diabetes. Cuidado de la diabetes. 2016; 39: 2296-2303.
- Shah VN, Grimsmann JM, Foster NC, et al: Tratamiento insuficiente de los factores de riesgo cardiovascular en la red de clínicas de intercambio de diabetes tipo 1 (Estados Unidos) y en los registros prospectivos de seguimiento de la diabetes (Alemania/Austria). Diabetes Obes Metab. 2020 Abr 24 [Epub ahead of print]. doi: 10.1111/dom.14069. PMID: 32329127
- Schneider CA. Hipoglucemia inducida por fármacos en pacientes diabéticos de tipo 2. Diabetólogo 2011; 7: 259-261.
- Soedamah-Muthu SS, et al: Risk Factors for Coronary Heart Disease in Type 1 Diabetic Patients in Europe The EURODIAB Prospective Complications Study. Diabetes Care 2004; 27: 530-537.
- www.deutsche-diabetes-gesellschaft.de/fileadmin/Redakteur/Leitlinien/Evidenzbasierte_Leitlinien/2018/S3-LL-Therapie-Typ-1-Diabetes-Auflage-2-Langfassung-09042018.pdf (último acceso 06.06.2020)
- www.d-journal.ch/diabetes-aktuell/blutdruck-und-diabetes/ (último acceso 06.06.2020)
- www.diabetologie-online.de/a/fortbildung-diabetes-und-fettstoffwechselstoerungen-1867483 (último acceso 06.06.2020)
CARDIOVASC 2020; 19(2): 28