Propósito: Este estudio observacional controlado multicéntrico investiga la inmunorreactividad de la α-sinucleína en el sistema nervioso entérico en pacientes con trastorno idiopático del comportamiento del sueño REM (iRBD, por sus siglas en inglés) y controles como posible biomarcador del síndrome de Parkinson prodrómico.
Antecedentes
Los estudios longitudinales sugieren que los trastornos del comportamiento del sueño REM son un estadio prodrómico de la enfermedad de Parkinson posterior hasta en un 80% de los casos. Otros biomarcadores de los síndromes prodrómicos del Parkinson son la hiposmia, el deterioro de la visión cromática, el déficit del transportador presináptico de dopamina en el putamen y la hiperecogenicidad de la sustancia negra en la ecografía transcraneal. El objetivo es detectar los síndromes prodrómicos del Parkinson lo antes posible para poder realizar estudios sobre la prevención de la enfermedad en el futuro.
Pacientes y metodología
El estudio observacional controlado multicéntrico incluyó a 20 pacientes con iRBD confirmada polisomnográficamente, 24 pacientes con enfermedad de Parkinson según los criterios diagnósticos del Banco de Cerebros de la Sociedad de la Enfermedad de Parkinson del Reino Unido y 22 controles sanos. Se tomaron biopsias de colon a todos ellos. Además del sentido del olfato (UPSIT y Sniffin’ Sticks) y los posibles síntomas parkinsonianos (MDS-UPDRS partes I-III), las biopsias se examinaron inmunohistoquímicamente en busca de α-sinucleína fosforilada y no fosforilada.
Resultados
En comparación con el grupo de control y los pacientes con iRBD, los pacientes con EP tenían puntuaciones significativamente más altas en el MDS-UPDRS, como era de esperar. El sentido del olfato se redujo significativamente tanto en los pacientes de Parkinson como en los de iRBD. Aunque todas las biopsias contenían cantidades suficientes de mucosa para su posterior análisis, en lo que respecta a la submucosa, sólo fue así en 16 controles, 21 pacientes con EP y 17 con iRBD. Se detectó α-sinucleína no fosforilada en la submucosa de todos los pacientes y controles. En la mucosa, la α-sinucleína fosforilada no pudo detectarse en ningún grupo. En la submucosa, se encontró α-sinucleína fosforilada en cuatro de 17 pacientes con iRBD, en uno de 19 pacientes con EP, pero en ninguno del grupo de control, pero sin alcanzar el nivel de significación.
Conclusiones de los autores
Teniendo en cuenta los trabajos posteriores, se concluye que los anticuerpos dirigidos contra la α-sinucleína no fosforilada (nativa) no tienen valor como biomarcadores de los síndromes prodrómicos de Parkinson. Aunque no se encontraron diferencias significativas, la detección de α-sinucleína fosforilada en cuatro de los 17 pacientes con iRBD y en ninguno de los controles es interpretada por los autores como una posible prueba de una diferencia relevante. Sin embargo, sigue sin estar claro por qué ya no puede detectarse en los pacientes de Parkinson. Se está discutiendo una conexión con una posible pérdida de células nerviosas durante el curso de la enfermedad. Otros factores que complican la realización de estos estudios y otros similares son las diferentes técnicas y objetivos de los anticuerpos utilizados.
Comentario
El diagnóstico correcto y precoz de la enfermedad de Parkinson no sólo es importante en el contexto de la rutina clínica (aquí es especialmente importante distinguirla de otras formas atípicas), sino que también reviste especial importancia en las cuestiones científicas actuales sobre la prevención de la enfermedad y la influencia causal en el curso de la misma. Así pues, la búsqueda de biomarcadores adecuados está directamente relacionada con la búsqueda de opciones terapéuticas causales. La manifestación temprana de la α-sinucleinopatía en el sistema gastrointestinal también sería coherente con la hipótesis de que la enfermedad se origina allí y se propaga a través del nervio vago al tronco encefálico y después a las demás regiones cerebrales.
InFo NEUROLOGÍA Y PSIQUIATRÍA 2016; 14(2): 33