En los últimos 25 años se han producido avances sin precedentes en el tratamiento del cáncer gastrointestinal. En el Congreso Mundial de este año, casi 3000 médicos, investigadores y profesionales debatieron sobre los últimos descubrimientos y las terapias más innovadoras. La atención se centró en la inmunoterapia, así como en los nuevos biomarcadores para la prevención y el pronóstico y en las posibilidades del análisis genético.
El cáncer de estómago es el quinto cáncer más frecuente en todo el mundo. Aunque su incidencia ha disminuido en el mundo occidental, sigue siendo la cuarta causa de muerte relacionada con el cáncer. La razón del mal pronóstico se debe principalmente al diagnóstico tardío y a la falta de tratamientos eficaces para la enfermedad metastásica. La subtipificación molecular se realizó según dos clasificaciones: A) La clasificación del Atlas del Genoma del Cáncer (TCGA) en 1) Virus de Epstein-Barr (VEB) positivo, 2) Inestabilidad de microsatélites (MSI), 3) Inestabilidad cromosómica (NIC) caracterizada por la histología intestinal, y 4) Genéticamente estable (GS) definida por una histología difusa. B) Clasificación del Grupo Asiático de Investigación sobre el Cáncer (ACRG) en 1) MSI, 2) Transición epitelial mesenquimal (EMT) definida por la tinción de E-cadherina, 3) p53 positivo y 4) p53 negativo. El objetivo ahora es encontrar un conjunto de proteínas marcadoras inmunohistoquímicas que puedan utilizarse para subtipificar de forma fiable las muestras histológicas [1]. Esto podría revelar una nueva forma de clasificar el cáncer gástrico más fácil de integrar en la toma de decisiones clínicas en comparación con los métodos de secuenciación del genoma.
Se estudió una cohorte de 283 pacientes con cáncer de estómago operados en el Hospital Universitario de Helsinki entre 2000 y 2009. Se creó un microarray de tejido tumoral (TMA) y se tiñó para los siguientes marcadores inmunohistoquímicos: Marcadores MSI MSH2, MSH6, MLH1 y PMS2, p53, E-cadherina e hibridación in situ del VEB EBERISH. Según la clasificación TCGA, el 15,7% de las pacientes presentaban el subtipo EBV+, el 17,0% MSI+, el 28,3% CIN o histología intestinal según la clasificación de Laurén y el 39,0% GS o histología difusa. Utilizando la clasificación ACRG, hubo 41 pacientes (20,0%) con MSI+, 21,5% con EMT+, 20,0% con p53+ y 38,5% con p53e. En el análisis univariante, el subtipo VEB tuvo el peor pronóstico en comparación con el subtipo NIC más benigno. El análisis multivariante mostró que, según la clasificación ACRG, p53+ tenía el mejor pronóstico, mientras que MSI, p53e y EMT tenían un pronóstico peor. EBERISH, MSI, p53 y la clasificación de Laurén no son biomarcadores estadísticamente significativos de forma individual, pero en un modelo de subtipo molecular demostraron ser herramientas eficaces.
En definitiva, el análisis inmunohistoquímico puede utilizarse para identificar subtipos moleculares de cáncer gástrico. El método es barato y rápido y, sin embargo, proporciona información importante para la toma de decisiones clínicas. Determinar el subtipo molecular a partir de una muestra histológica podría ayudar a dirigir mejor los tratamientos a los subgrupos de pacientes adecuados y podría proporcionar información valiosa sobre el pronóstico.
Centrado en el carcinoma pancreático
El adenocarcinoma ductal pancreático (PDAC) es cada vez más frecuente y tiene un mal pronóstico. Principalmente, debido a la resistencia frecuente y precoz a los tratamientos estándar (SOC). Los organoides derivados de tumores de pacientes (ODP) son modelos prometedores para la oncología de precisión funcional (OPF). Para poder utilizarse en la práctica clínica y aportar beneficios a la mayoría de los pacientes, la OPF debe cumplir tres condiciones: 1) Debe ser factible con una cantidad limitada de material, 2) debe tener un amplio espectro de medicamentos; y 3) debe entregar los resultados de las pruebas lo antes posible. Se realizó un estudio para investigar si la DOP puede utilizarse en la práctica clínica para el tratamiento de pacientes con PAOD [2].
Se recogieron un total de 76 muestras. El 91% de los pacientes habían recibido previamente FOLFIRINOX, el 53% gemcitabina y el 44% (nab)-paclitaxel. Las tasas de captación de la DOP fueron del 62% (n=47/76) y del 55% para la biopsia metastásica, del 40% (2/5) para el aspirado pancreático, del 93% (14/15) para la ascitis, del 25% (1/4) para el derrame pleural y del 100% (3/3) para la resección del tumor primario, respectivamente. El tiempo medio de elaboración de un quimiograma fue de 7,7 semanas. La supervivencia global (SG) desde el diagnóstico de metástasis fue de 17,2 meses. La mediana de la SG fue mayor en los pacientes a los que no se diagnosticó DOP (5,2 meses) que en los pacientes a los que se diagnosticó DOP (3,3 meses). La mediana de aciertos fue de tres. En el 90% de los casos, se identificó al menos un acierto y en el 87% de los casos, al menos uno de los aciertos no era un SOC (es decir, fluorouracilo, irinotecán, oxaliplatino, gemcitabina o paclitaxel). Los principales éxitos identificados fueron olaparib (n=15/47), gemcitabina (n=14/47) y everolimus (n=11/47). Las principales alteraciones moleculares identificadas en la DOP fueron KRAS (98%), TP53 (72%), CDKN2A/B (17%) y SMAD4 (17%). Los datos genómicos (datos WES) se correlacionaron con el tumor original con una buena tasa de concordancia (88%).
Congreso:25º Congreso Mundial sobre Cáncer Gastrointestinal 2023
Literatura:
- Brofkin J, Kaprio T, Hagström J, et al.: Prognostic effect of immunohistochemically classified molecular subtypes in gastric cancer. PD-1. WGI 2023 Poster Discussion Abstracts. ESMO 25th World Congress on Gastrointestinal Cancer 2023.
- Boileve A, Goudarzi N, Cartry J, et al.: Organoids as tools for functional precision oncology in advanced pancreatic cancer. PD-10. ESMO 25th World Congress on Gastrointestinal Cancer 2023.
InFo ONKOLOGIE & HÄMATOLOGIE 2023; 11(4): 28