La rosácea es percibida como molesta por los pacientes y puede conducir a la estigmatización. La recién publicada directriz S2k explica la clasificación orientada a los síntomas según los fenotipos, cómo se diferencia la rosácea de otras dermatosis, como el acné, y qué opciones de tratamiento existen. Una de las prioridades de la directriz es la rosácea ocular y los aspectos psicosociales de la enfermedad.
La rosácea es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel, no contagiosa, que suele aparecer en la mediana edad y se caracteriza por un eritema o rubor persistente y telangiectasias. También pueden aparecer pápulas, pústulas y engrosamiento nodular de la piel. Las zonas de predilección son la frente, la nariz, la barbilla y las mejillas. Más raramente, las manifestaciones de la rosácea se encuentran en el cuero cabelludo, el cuello o la zona del pecho. Aunque al principio se puede influir bien sobre los síntomas desde el punto de vista terapéutico, las recaídas se agravan con el tiempo en algunos pacientes. La zona de los ojos también puede verse afectada. “La rosácea es una dermatosis compleja cuya antigua clasificación por subtipos ha quedado obsoleta”, subraya el coordinador de las directrices, el Dr. med. rer. biol. hum. Benjamin Clanner-Engelshofen [1]. La nueva directriz S2k recomienda una clasificación orientada a los síntomas según los fenotipos [2]. “Esta es la base para un diagnóstico y una terapia individualizados”, afirma la Dra. Clanner-Engelshofen, dermatóloga de la Clínica y Policlínica de Dermatología y Alergología de la LMU de Múnich [1]. La guía presenta las numerosas formas especiales de rosácea, así como numerosos diagnósticos diferenciales, incluidas las posibilidades diagnósticas de diferenciación. La directriz S2k elaborada bajo los auspicios de la Sociedad Dermatológica Alemana (DDG) contiene ahora un capítulo aparte sobre la afectación ocular en la rosácea [2].
Alrededor de la mitad de los pacientes con rosácea tienen afectación ocular
Los autores de las directrices analizan detalladamente todas las opciones de tratamiento, teniendo en cuenta el estado actual de los estudios: terapia tópica, terapia sistémica, tratamiento combinado, terapias alternativas (TFD, láser, IPL, cirugía), terapia de formas especiales, tratamiento de la rosácea ocular y medidas dermocosméticas. “El 50% de los pacientes están afectados por rosácea ocular. Aquí, la directriz ofrece consejos concretos sobre la terapia farmacológica, pero también -dirigidos a los afectados- consejos para una buena higiene del borde del párpado”, afirma la Dra. Clanner-Engelshofen (Tab. 1) [1].
Se aborda el tratamiento de la estigmatización
Además de la Sociedad Alemana de Oftalmología y la Sociedad de Dermofarmacia, la Deutsche Rosazea Hilfe e.V. también participó en la elaboración de la directriz S2k del DDG. “La inclusión de las organizaciones de pacientes en el trabajo de las directrices es importante y también se refleja en el hecho de que hemos incluido un capítulo aparte sobre los aspectos psicosociales, que han recibido menos atención hasta ahora”, explica la Dra. Clanner-Engelshofen [1]. Los síntomas cutáneos asociados a la rosácea pueden llevar a la estigmatización, provocar ansiedad y depresión, y afectar así a la calidad de vida.
La directriz se dirige a un público interdisciplinar
Se dedica un capítulo aparte al tema de la dermocosmética. Aquí, los pacientes aprenden cómo pueden ayudar ellos mismos a su piel dermocosméticamente. La piel debe limpiarse suavemente, por ejemplo con agua tibia y sustancias de lavado de pH neutro. “Debe evitarse todo lo que irrite la piel, como los frotamientos fuertes, los peelings y las sustancias que estimulan la circulación sanguínea”, subraya la Dra. Clanner-Engelshofen [1]. Se siguen recomendando los cosméticos con ingredientes activos para mejorar los síntomas y el uso diario de un protector solar de amplio espectro.
La nueva directriz S2k no sólo está dirigida a los dermatólogos, sino que contiene muchas recomendaciones importantes para los médicos de campos afines, pero también para los enfermos de rosácea. “Nos alegraría que se hiciera caso de esta directriz, sobre todo en medicina general y oftalmología”, resume el Prof. Dr. med. Michael Hertl, presidente de la Sociedad Alemana de Dermatología (DDG) [1].
Como complemento a la directriz sobre la rosácea, se ha publicado una ayuda para la aplicación de la directriz en forma de breve presentación bajo los auspicios de la Comisión para la Garantía de la Calidad en Dermatología [3].
Congreso: Sociedad Dermatológica Alemana
Literatura:
- “Rosácea: la nueva directriz S2k se centra en la afectación ocular, los aspectos psicosociales y la dermocosmética”, Deutsche Dermatologische Gesellschaft, 17.03.2022.
- Directriz S2k: “Rosácea”, 2022, número de registro AWMF 013-065.
- DDG/BVDD: Presentación breve (ayuda para la aplicación de la directriz), directriz S2k “Rosácea”, registro AWMF nº. 013-065.
- Tan J, et al: Prevalencia de la rosácea en la población general de Alemania y Rusia – El estudio RISE. J Eur Acad Dermatol Venereol 2016; 30(3): 428-434.
- Deng Y, et al. El instrumento de calidad de vida específica de la rosácea (RosQol): Revisión y validación entre pacientes chinos. PLoS One 2018; 13(2):e0192487.
PRÁCTICA DERMATOLÓGICA 2022; 32(2): 34-35