Un estudio de medicina medioambiental sobre los efectos del polen de abedul en alérgicos frente a no alérgicos llegó a resultados interesantes. Entre otras cosas, existen pruebas de que los niveles de IgG1 e IgG4 son predictores de los síntomas inducidos por el polen en ambas cohortes.
Los alérgenos del polen de abedul suelen desencadenar reacciones alérgicas en primavera (por ejemplo, fiebre del heno, inflamación ocular). El pico de polen de abedul se da en los meses de abril y mayo. Uno de los principales alérgenos es la proteína Bet-v-1 (Fig. 1), que también es un marcador de sensibilización a especies arbóreas afines como el aliso, el haya, el castaño, el avellano, el carpe y el roble. La alergia al polen de abedul es común entre los alérgicos y hasta el 80% de los que la padecen desarrollan reacciones de hipersensibilidad a proteínas similares a la Bet-v-1 de los alimentos vegetales [1,2]. Según los resultados de este estudio, el polen de abedul también puede provocar síntomas en personas no alérgicas. Los datos indican que los niveles nasales de IgG1 e IgG4 son predictores de los síntomas inducidos por el polen.
¿Un libro con siete sellos?
Por el momento, no se sabe mucho sobre las respuestas de la inmunoglobulina específica Bet-v-1 al polen de abedul, especialmente en lo que respecta a los síntomas nasales. Además, se sabe poco sobre cómo afecta exactamente la exposición al polen en condiciones naturales a la salud de las personas no alérgicas. El objetivo del presente estudio era, por tanto, evaluar los efectos de la exposición al polen de abedul sobre los síntomas respiratorios y sobre la respuesta inmunitaria humoral en individuos alérgicos y no alérgicos: (a) Comparación de las respuestas inmunitarias humorales locales de pacientes con rinitis alérgica frente a controles sanos durante y fuera de la estación del polen, (b) Evaluación de los procesos cinéticos de la respuesta inmunitaria bajo exposición natural al polen a lo largo de un año, (c) Asignación de los perfiles de respuesta inmunitaria a la aparición de síntomas nasales.
Resultados sorprendentes
Lo más sorprendente es que no sólo los sujetos alérgicos sino también los no alérgicos mostraron síntomas nasales durante la estación del polen de abedul, y éstos se correlacionaron con las concentraciones de polen en el aire. A diferencia de la exposición al polen de avellano y de aliso, que provocan efectos retardados, el polen de abedul tiene un efecto inmediato sobre los síntomas tanto en las personas alérgicas como en las no alérgicas.
Una comparación de los valores durante y fuera de la estación del polen muestra que los niveles totales de IgA, así como los niveles específicos de Bet-v-1 y FLC de las secreciones nasales son significativamente superiores durante la estación del polen sólo en los no alérgicos. Una comparación de grupos muestra que los no alérgicos tienen niveles significativamente más altos de IgA Bet-v-1 específica, IgG1 y FLC (cadena ligera libre) durante la estación que la cohorte de alérgicos (correlacionada positivamente con la concentración de polen de abedul). En cuanto a los niveles de IgG4, se demostró que eran significativamente más elevados en los alérgicos que en el grupo de control tras el final de la temporada principal de polen. Los perfiles inmunológicos de las secreciones nasales de ambas cohortes difirieron con respecto a las siguientes citocinas: IL-33, eotaxina-2, IL-1β.
Un análisis de componentes principales basado en una matriz de correlaciones de los inmunomoduladores nasales normalizados también reveló que las cargas son mayores para la IgG1 y la IgG4 nasales.
Fuente: 46ª Conferencia Anual del ADF, Múnich (D), 13-16 de marzo de 2019
Literatura:
- ImmunoCAP Explorer: www.immunocapexplorer.com/de/molekulare-allergologie/birkenpollen-allergie, última consulta: 17 de marzo de 2019.
- Groh N, et al.: Los epítopos de inmunoglobulina E y G4 del alergeno principal del polen de abedul Bet v 1 comparten residuos críticos para la unión de anticuerpos. Clin Transl Allergy 2013; 3(Suppl3): O15. Publicado en línea el 25 de julio de 2013. doi:10.1186/2045-7022-3-S3-O15
- Gökkaya M, et al.: Cambios en los niveles de inmunoglobulinas bajo exposición real al polen: Papel de los anticuerpos nasales IgA e IgG. Presentación de póster 46ª Reunión Anual de la ADF, Múnich, 13-16 de marzo de 2019.
PRÁCTICA DERMATOLÓGICA 2019; 29(2): 33