Los marcadores sustitutos son importantes en el tratamiento de la EII. Los investigadores hallaron pruebas de que la síntesis microbiana de butirato podría predecir la eficacia terapéutica y, por tanto, desempeñar un papel importante en la toma de decisiones terapéuticas personalizadas. En otro estudio, la lipocalina-2 fecal demostró ser un biomarcador sensible para evaluar la carga inflamatoria y puede ser otro parámetro relevante en el futuro junto con la calprotectina fecal para medir el curso de la EII.
La incidencia de la enfermedad de Crohn (M. Crohn) y la colitis ulcerosa (C. ulcerosa) ha aumentado considerablemente en los últimos años. En lo que respecta a la optimización de las terapias dirigidas contra la EII, la identificación de biomarcadores reviste especial importancia. Entre otras cosas, permiten predecir la respuesta a la terapia y desempeñan un papel importante en la evaluación de la progresión. Recientemente se han publicado dos artículos muy interesantes en la revista Journal of Crohn’s and Colitis [1,2].
El butirato como posible predictor de la respuesta al tratamiento
La investigación de los mecanismos biológicos de los procesos inflamatorios en la mucosa intestinal y el desarrollo de nuevos predictores de la eficacia terapéutica son muy relevantes. La Dra. Maria Effenberger de la Universidad Médica de Innsbruck (A) ha buscado metabolitos predictivos en colaboración con especialistas en microbioma de la Universidad de Kiel. En la actualidad se dispone de varias terapias establecidas para el tratamiento de la enfermedad inflamatoria intestinal, como la azatioprina (AZA) en comprimidos, con una tasa de respuesta de alrededor del 50%, y la terapia de infusión con anticuerpos anti-TNF [1,3]. “Utilizando muestras de heces y sangre de 65 pacientes con EII, pudimos analizar cambios específicos en el microbioma y la remisión clínica. Descubrimos que los pacientes cuyo microbioma produce mucho butirato -este ácido graso de cadena corta es el producto final en la descomposición de carbohidratos complejos- responden bien a la terapia con AZA, un efecto que no se encontró en la misma medida con la terapia anti-TNF”, explica el Dr. Effenberger [3].
La AZA es uno de los inmunosupresores más utilizados en el tratamiento a largo plazo de la EII y se emplea principalmente para el mantenimiento de la remisión o en la EII crónica activa. Por lo general, un efecto clínicamente relevante sólo se produce con un retraso de entre dos y seis meses. Por lo tanto, un tratamiento sólo se considera ineficaz si no puede detectarse ningún efecto significativo tras este periodo de tiempo, lo que a menudo se refleja en el hecho de que el corticosteroide, que se utiliza simultáneamente para tratar el brote agudo, no puede suspenderse por completo [4].
El uso de los bloqueantes del TNF, los primeros productos biológicos aprobados para la indicación de la EII, se ha probado durante casi dos décadas. El mecanismo de acción consiste en neutralizar el mediador inflamatorio factor de necrosis tumoral-α (TNF-α), que se produce en cantidades muy grandes en la enfermedad de Crohn y en la C. ulcerosa [4]. Los bloqueantes del TNF-α aprobados para la enfermedad de Crohn tanto por C.ulcerosa como por M. en Suiza son actualmente el adalimumab (Humira®) y el infliximab (Remicade®). Certolizumab pegol (Cimzia®) también está disponible para la indicación enfermedad de Crohn y golimumab (Simponi®) para la colitis ulcerosa [5].
Lipocalina-2 fecal (FLCN2) como parámetro de progresión
La remisión endoscópica se asocia a una reducción de las recidivas y es, por tanto, un objetivo importante del tratamiento. Se necesitan marcadores sustitutos que se correlacionen bien con los hallazgos endoscópicos para el seguimiento individual. Hasta la fecha, la calprotectina fecal (FCAL) en particular se ha considerado el patrón oro para evaluar la carga inflamatoria de las enfermedades intestinales crónicas. Un aumento por encima de un determinado valor es un importante marcador pronóstico de una reaparición de la inflamación en el intestino [6]. Así, aunque la FCAL es un excelente biomarcador en la EII, es producida casi exclusivamente por los neutrófilos y existe cierta incertidumbre, sobre todo en casos de actividad inflamatoria de bajo nivel o crónica [7]. La lipocalina 2 (LCN2), a diferencia de la calprotectina, también se expresa en el epitelio intestinal. En un estudio dirigido por el profesor adjunto PD Dr. Alexander Moschen, PhD, los científicos investigaron el potencial diagnóstico de la proteína LCN2, que combate las infecciones y a la que los investigadores de Innsbruck pudieron atribuir hace varios años una función protectora en el desarrollo de la inflamación intestinal y los tumores intestinales [2]. En el estudio reciente, la lipocalina-2 fecal (FLCN2) ha resultado ser un biomarcador especialmente sensible. “En dos grandes estudios comparativos, pudimos demostrar que FLCN2 es un biomarcador fecal equivalente para evaluar la carga real de la enfermedad. Sin embargo, para los pacientes con poca inflamación, tiene la ventaja particular de que, a diferencia de la FCAL, puede detectarse en el intestino aunque la inflamación ya no sea clínicamente detectable. La proteína LCN2, que expresan, entre otras, las células epiteliales de la pared interna del intestino, resulta así idónea como marcador preciso de la inflamación molecular”, explica el Prof. Moschen [3].
Literatura:
- Effenberger M, et al.: La síntesis microbiana de butirato indica la eficacia terapéutica de la azatioprina en pacientes con EII. J Crohns Colitis 2020 ;jjaa152. doi: 10.1093/ecco-jcc/jjaa152. En línea antes de impresión.
- Zollner A, et al.: Biomarcadores fecales en las enfermedades inflamatorias intestinales: calprotectina frente a lipocalina-2 – un estudio comparativo. J Crohns Colitis 2020; jjaa124. doi: 10.1093/ecco-jcc/jjaa124. En línea antes de impresión.
- “Nuevos biomarcadores para la terapia dirigida de las enfermedades inflamatorias intestinales”, Universidad Médica de Innsbruck, 22.09.2020. www.i-med.ac.at/mypoint/news/748284.html
- Ibdnet.ch: Enfermedad inflamatoria intestinal crónica: Terapia de la EII hoy y mañana, Información para el paciente: 3ª edición de , www.ibdnet.ch, último acceso el 11.01.2021
- Compendio suizo de medicamentos: https://compendium.ch
- De Vos M, et al.: Mediciones consecutivas de calprotectina fecal para predecir la recaída en pacientes con colitis ulcerosa que reciben tratamiento de mantenimiento con infliximab. Enfermedad inflamatoria intestinal 2013; 19(10): 2111-2117.
- Zollner A, et al: Calprotectina frente a lipocalina 2 en la enfermedad inflamatoria intestinal. Z Gastroenterol 2019; 57(05): e138.
PRÁCTICA GP 2021; 16(1): 28