La vara de oro es una planta medicinal con una tradición de medicina popular que se ha utilizado durante siglos para tratar las infecciones del tracto urinario. Sin embargo, hasta la fecha no existen estudios según las normas de los ECA que demuestren su eficacia. ¿Se puede seguir recomendando el uso de la vara de oro?
La vara de oro común (Solidago virgaurea L.) de la familia de las margaritas (Asteraceae) es una planta herbácea y robusta muy extendida en Europa Central (Fig. 1). La vara de oro prefiere los lugares pobres en nutrientes y más bien secos, como los bordes de las carreteras o los bosques. También pueden encontrarse en pastos agrestes. Su área de distribución en Europa y Asia es muy amplia. Crece tanto en las zonas árticas como en las subtropicales, pero allí sólo en las montañas. Existen diferentes subespecies según la región.
Ingredientes
De la vara de oro se pueden extraer diversos ingredientes. La Guía de fitoterapia, una obra de referencia sobre la fitoterapia, menciona los siguientes ingredientes [1]:
- 1-3% de flavonoides
- Saponinas
- Fenilglicósidos
- Taninos
- Aceite esencial
De los fenilglucósidos, el leicarpósido y el virgaureósido merecen una mención especial, ya que sirven tanto de sustancia guía (para la determinación del contenido) como de sustancia activa. El ácido 3,5-dicaffeolquínico, el ácido neoclorogénico y el ácido clorogénico también contribuyen a ello.
Significado de la medicina popular
En un artículo de la Wiener Medizinische Wochenschrift [2], se describe la Solidago virgaurea como una planta medicinal con una tradición centenaria en el tratamiento de las enfermedades del tracto urinario. Los registros históricos contienen referencias a su radio de acción: se dice que la vara de oro tiene efectos diuréticos, espasmolíticos débiles, antiflogísticos y antibacterianos.
La Comisión E, así como el ESCOP y el HMPC de la EMA (Tab. 1) dan fe del efecto positivo de la planta. La más reciente de estas monografías, redactada por el HMPC, reconoce el “uso bien establecido” de la planta medicinal en el tratamiento de las infecciones del tracto urinario, pero, al igual que las demás monografías, no puede hacer referencia a ningún estudio clínico correspondiente. La monografía del HMPC recomienda los siguientes usos, derivados de la experiencia de la medicina popular [3]:
- como hierba: 2-4×/día 3-5 g de hierba seca
- como tintura: 3×/día 0,5-2 ml de tintura
- como extracto: 3×/día 350-450 mg de extracto seco
Apenas hay estudios hasta ahora
No se ha podido encontrar ningún estudio en Medline que verifique la eficacia médica del Solidago. La Guía de Fitoterapia menciona cuatro estudios observacionales de los años 1996 a 2002 [1], que probaron la eficacia de varios medicamentos con Solidago como principio activo autorizados en Alemania. En estos estudios observacionales, la eficacia del preparado de hierbas se investigó principalmente en las infecciones urinarias crónicas recurrentes. Las poblaciones de estudio eran grandes, oscilando entre 512 y 3927 pacientes. En todos los estudios se registraron resultados positivos entre muy buenos y muy significativos. Sin embargo, no se pudo comprobar la calidad de estos estudios, sobre todo porque sólo se disponía de las menciones de la guía, algunas de las cuales seguían siendo vagas. Un organismo de evaluación como la Colaboración Cochrane, que sólo acepta ECA, no aceptaría estos estudios observacionales como prueba científica de eficacia. Además, las observaciones de aplicación mencionadas datan de una época con criterios de estudio menos estrictos en cuanto a los criterios de inclusión y exclusión, los parámetros objetivo y la interpretación de los resultados.
Medicina experimental frente a ensayos clínicos
Un médico puramente ortodoxo diría en este punto: “No hay pruebas de la eficacia de Solidago virgaurea. En consecuencia, debe rechazarse su uso”. ¿Es ésta la última palabra en sabiduría? No, porque eso no haría más que descartar como falacia el conocimiento experimental que se ha transmitido de generación en generación durante siglos. Una tradición tan larga de conocimientos sobre los efectos curativos de las plantas medicinales puede considerarse sin duda una prueba de eficacia.
No obstante, se recomienda precaución. Por ejemplo, una empresa podría comercializar cualquier preparado a base de plantas, por ejemplo una combinación de diferentes plantas que parezca interesante a primera vista, y hacer referencia a conocimientos empíricos centenarios en la publicidad del producto. Esto podría animar a los “charlatanes”. Incluso las fuentes de la medicina empírica deben evaluarse críticamente y sólo pueden calificarse de convincentes si existen varias creíbles de ellas que confirmen una aplicación una y otra vez en el transcurso de los siglos.
No hay que negar en absoluto el valor y la necesidad de los ensayos clínicos, al contrario: los ensayos clínicos son una herramienta importante para evaluar la eficacia de los medicamentos sintéticos y a base de plantas. Y es deseable que las cajas de enfermedad reembolsen principalmente los gastos de los preparados cuya eficacia haya sido probada por estudios clínicos.
Si hay que evaluar la eficacia de un preparado que no ha sido probado en ensayos clínicos o estudios clínicos, hay que evaluarlo. sólo se ha probado en estudios observacionales, pero su ingrediente activo, en este caso Solidago virgaurea, ha sido descrito como eficaz durante siglos por fuentes creíbles, entonces esto puede aceptarse como prueba de eficacia basada en la experiencia. Esto se debe a que incluso los médicos no basan su terapia únicamente en ensayos clínicos; su propia experiencia, la recomendación de líderes de opinión, etc. desempeñan un papel importante.
Resumen
El uso medicinal de la vara de oro, Solidago virgaurea L., se basa en una tradición de medicina popular centenaria como agente terapéutico para las infecciones del tracto urinario. Esto aún no se ha validado científicamente con ensayos clínicos, aunque algunos estudios observacionales de uso en torno al cambio de milenio confirman la eficacia en las infecciones crónicas recurrentes del tracto urinario. Sin embargo, la larga tradición folclórico-medicinal así como las observaciones de uso pueden ser un motivo para que los médicos prescriban la vara de oro en forma de tintura o tintura madre (Tab. 2), si es necesario en combinación con otras plantas medicinales activas en las vías urinarias.
Literatura:
- Schilcher H, Kammerer S, Wegener T: Leitfaden Phytotherapie, 3. Auflage. Munich: Elsevier, 2007, 113.
- Melzig MF: Vara de oro – un clásico en fitoterapia urológica. Wien Med Wochenschr 2004; 154: 523-527.
- Comité de medicamentos a base de plantas: Monografía comunitaria sobre las plantas medicinales Solidaginis virgaureae L., Herba. 2008. www.ema.europa.eu/docs/en_GB/document_library/Herbal_-_Community_herbal_monograph/2009/12/WC500018159.pdf. Estado 6.8.2018.
PRÁCTICA GP 2018; 13(9): 6-7