Este número se centra en dos apasionantes temas dermatológicos de gran relevancia en la práctica diaria: el tratamiento orientado al paciente de la dermatitis atópica y el prurito en la vejez.
La Prof. Dra. med. Dagmar Simon, del Inselspital de Berna, ofrece una visión detallada y relevante para la práctica de las actuales estrategias de tratamiento contra la dermatitis atópica, una enfermedad inflamatoria que se da con frecuencia tanto en niños como en adultos. Al hacerlo, se centra en el paciente individual: ¿Cómo se puede tratar el cuadro clínico de forma individualizada? Especialmente debido a la gran diversidad de manifestaciones, este enfoque tiene mérito y sentido. El artículo acompaña al lector a través de las posibilidades de terapia, que en principio siempre incluye el enfoque de terapia dual “reengrasante y antiinflamatorio”, pero que puede variar, por ejemplo, en función de las regiones afectadas, los riesgos de sobreinfecciones, los posibles desencadenantes alérgicos o el curso temporal.
El Prof. Simon también hace hincapié en la importancia de la educación del paciente, que en realidad puede ser decisiva para el cumplimiento, pero también para el bienestar del paciente.
PD El Dr. med. Paul Bigliardi, del Hospital Universitario Nacional de Singapur, que lleva años dedicándose intensamente a la investigación clínica y experimental sobre el prurito, escribe sobre el prurito en la vejez, cuyo tratamiento es también un reto. La percepción tan subjetiva del estímulo dificulta la investigación basada en pruebas sobre la terapia. Existen muchas causas posibles del prurito: entre las fisiológicas, cabe mencionar sin duda la piel seca, que suele aparecer en la vejez debido a la reducción del sebo y el sudor. La barrera cutánea, nuestro sistema de protección contra las sustancias irritantes, también se ve afectada. Por lo tanto, el reengrasado es también un pilar central del tratamiento en este caso, aunque no siempre es fácil lograr un buen cumplimiento de la terapia tópica, ya que no es infrecuente que las personas mayores tengan problemas para aplicarse la crema por sí mismas debido a su limitada movilidad .
Por ello, este PRAXIS DE DERMATOLOGÍA le ofrece una vez más un enfoque apasionante e informativo de los problemas cutáneos de gran actualidad que se plantean con frecuencia en la práctica. Espero que disfrute con su lectura y le envío un cordial saludo.
Su
Prof. Dr. med. Peter Schmid-Grendelmeier
PRÁCTICA DERMATOLÓGICA 2014; 24(2): 4