Este año la Sociedad Suiza de Dermatología y Venereología celebra su centenario. En el congreso anual de Montreux se presentó un libro sobre la historia de la sociedad profesional*, pero sobre todo se echó una mirada al futuro. Una impresionante muestra del rendimiento de los departamentos de dermatología de los hospitales suizos puso de manifiesto el alto nivel de la dermatología médica. El profesor Michel Gilliet, de Lausana, como presidente de la conferencia, hizo un breve balance provisional durante una pausa.
Prof. Gilliet, le tocaba a Lausana, y por tanto a usted como presidente de la conferencia, celebrar el “Centenario” de la SGDV de una manera adecuada. El pasado, pero sobre todo el presente y el futuro de la dermatología suiza estaban en el orden del día. ¿Está satisfecho de cómo van las cosas?
Profesor Gilliet: Sí, estoy muy satisfecho. Sabía hace tres años, cuando me nombraron para Lausana, que esta reunión especial recaería en el equipo del Departamento de Dermatología y Venereología del CHUV y en mí, y aceptamos de buen grado esta honorable tarea. No estábamos solos, sino que muchas personas participaron en la planificación y el trabajo preliminar.
Se deploró en parte la división tripartita en dermatología clínica, estética y quirúrgica y un cierto desequilibrio a favor de las “esteticistas” y el exceso de especialización. ¿Cómo lo ve?
La diversidad es una de las características fundamentales de nuestra especialidad, y en la formación se hace hincapié en que un dermatólogo puede abarcarlo todo. La especialidad de un colega es entonces secundaria, pero debe hacerlo bien. Junto con las materias orientadas a la cirugía plástica y la oncología médica, nuestra disciplina ha tenido que multiplicar los esfuerzos en el campo de la dermatocirugía y la dermatooncología en los últimos años, ya que estamos experimentando una auténtica epidemia de cáncer de piel.
Un gran problema para el futuro es contar con personal. ¿Y la próxima generación de dermatólogos?
Tiene buena pinta, el tema es lo suficientemente interesante, no nos preocupan los jóvenes. La dermatología es una materia muy innovadora y de nuestras investigaciones también se derivan hallazgos importantes para otras disciplinas. Debemos estar orgullosos de ello, pero no dormirnos en los laureles.
Entrevista: Dra. Susanne Schelosky
*Espíritu y alma de la dermatología y la venereología suizas 1913-2013. Neuchâtel: Editions Alphil 2013. ISBN 978-2-940489-46-6.