En las últimas décadas se ha descubierto el papel central de los péptidos natriuréticos (PN) en la interacción entre el corazón y los riñones. Estos péptidos, especialmente el péptido natriurético auricular (ANP) y el péptido natriurético cerebral (BNP), son reguladores cruciales del equilibrio de líquidos y electrolitos. Entre otras cosas, controlan la excreción de sodio, la presión sanguínea y el volumen del espacio líquido extracelular.
(rojo) Una enzima clave en la activación de estos péptidos es la corina, una serina proteasa transmembrana que se expresa no sólo en el corazón sino también en los riñones. Este hallazgo aporta nuevos conocimientos sobre la función autonómica de los riñones en la regulación del equilibrio de sodio y agua y desafía las nociones convencionales del eje cardiorrenal.
Corina y la activación de ANP: un papel central en el corazón y el riñón
El péptido natriurético auricular (ANP) se libera en respuesta a la sobrecarga de volumen o al estiramiento de las aurículas del corazón. La corina, una enzima proteolítica, es responsable de la conversión del proANP inactivo en su forma activa. Del mismo modo, el BNP, que se libera principalmente de los ventrículos del corazón durante la sobrecarga de presión o de volumen, es activado por la enzima furina. Ambos péptidos se unen al receptor NPR-A, que media una serie de efectos fisiológicos a través del mensajero secundario GMPc (monofosfato de guanosina cíclico), entre ellos la promoción de la excreción de sodio (natriuresis) y la relajación del músculo liso vascular. La idea anterior era que los PN se producían principalmente en el corazón y se liberaban al torrente sanguíneo para actuar en los riñones y otros órganos. Sin embargo, nuevos hallazgos demuestran que la corina y el ANP también se producen localmente en los riñones, lo que sugiere la existencia de un sistema independiente de PN en el riñón que podría funcionar con independencia del eje cardiorrenal clásico. Esto abre nuevas perspectivas sobre el papel del riñón en la regulación del equilibrio de sodio y agua.
El sistema NP local del riñón: regulación autónoma del equilibrio de sal y agua
Aunque se considera que el corazón es el lugar más importante de la síntesis de NP, estudios recientes demuestran que los riñones también tienen componentes del sistema de NP, como la corina, el ANP y el receptor NPR-A. Estas proteínas se localizan en distintas partes del sistema tubular renal, sobre todo en los túbulos proximales, el asa de Henle y los conductos colectores. La activación del receptor NPR-A inhibe la reabsorción de sodio en estos túbulos, lo que provoca un aumento de la excreción de sodio y de la diuresis. Cabe destacar que la corina y el PNA están co-localizados en los mismos segmentos renales, lo que indica que el PNA producido localmente desempeña un papel importante en la regulación autonómica de la función renal.
Esta producción local de PNA en los riñones parece desempeñar un papel crítico en la regulación del equilibrio de líquidos y electrolitos, sobre todo en condiciones asociadas a una mayor carga de sal o a la retención de líquidos. En modelos animales con deficiencia de corina (Cor-/-), se observó una capacidad reducida para excretar sodio, lo que provocó hipertensión e insuficiencia cardiaca. Estos resultados sugieren que la corina desempeña un papel central en el mantenimiento de la presión arterial y el equilibrio de líquidos no sólo en el corazón sino también en los riñones.
Importancia clínica de la corina y los péptidos natriuréticos
Los pacientes con mutaciones genéticas que conducen a la pérdida de la función de la corina presentan anomalías tanto cardiovasculares como renales. Un estudio clínico reciente describió a dos hermanos con deficiencia homocigota de corina que padecían hipertensión, miocardiopatía, fibrilación auricular y fibrosis auricular izquierda. Estos pacientes mostraron una excreción reducida de electrolitos y creatinina a pesar de unos niveles elevados de BNP, lo que indica que el BNP no puede compensar totalmente la ausencia de ANP.
Esto plantea una pregunta interesante: ¿Cuál es el papel del PNA producido localmente en los riñones en comparación con los péptidos natriuréticos producidos en el corazón? Los resultados de este estudio sugieren que la ausencia de PNA en los riñones, debida a la deficiencia de corina, puede causar un deterioro significativo de la función renal, incluso cuando se eleva el BNP como mecanismo de sustitución. Esto apoya la hipótesis de que el sistema renal de PN tiene una función autónoma que actúa independientemente del sistema convencional cardiorrenal de PN.
Modelos animales y estudios genéticos: Perspectivas sobre el funcionamiento del sistema NP
Los estudios en animales aportan pruebas importantes del papel de la corina en el eje cardiorrenal. En modelos de ratón modificados genéticamente en los que se eliminó la corina en el corazón (hcKO) o en los riñones (kcKO), se hallaron diferencias significativas en la capacidad para excretar sodio y regular la presión arterial. En concreto, con una dieta rica en sal, los ratones kcKO desarrollaron una exacerbación de la hipertensión por sal y disfunción renal, lo que sugiere que la función de la corina en los riñones es crítica para la regulación de la excreción de sodio. Curiosamente, esta disfunción no fue tan pronunciada en los ratones hcKO, lo que subraya aún más el importante papel de los riñones en este sistema. Estos hallazgos tienen importancia clínica, ya que sugieren que promover la actividad de la corina en los riñones podría ser una estrategia terapéutica potencial para el tratamiento de la hipertensión y la insuficiencia renal. Especialmente en pacientes que sufren sensibilidad a la sal o retención de líquidos, el apoyo a la producción renal de PNA podría ayudar a regular mejor el equilibrio de sodio y agua.
Resumen y perspectivas
Aunque el corazón sigue desempeñando un papel central en la regulación del equilibrio de líquidos y electrolitos, se ha demostrado que los riñones tienen su propio sistema autónomo de PN que desempeña un papel igualmente importante. Este sistema local de PN podría desempeñar un papel crucial en la regulación de la excreción de sodio y la presión arterial, especialmente en pacientes con enfermedades cardiovasculares o renales.
Dada la importancia del sistema NP para la regulación del equilibrio de líquidos y electrolitos, las nuevas estrategias terapéuticas para apoyar la actividad de la corina en los riñones podrían ofrecer enfoques prometedores para el tratamiento de la hipertensión, la insuficiencia cardiaca y la disfunción renal.
Fuente: Abassi Z, Hamo-Giladi DB, Kinaneh S, Heyman SN: The endocrine basis of the cardio-renal axis: New perspectives regarding corin. Physiol Rep 2024 jul; 12(13): e16105. doi: 10.14814/phy2.16105. PMID: 38942727; PMCID: PMC11213627.
CARDIOVASC 2024; 23(3): 36