Paciente de 40 años acude al gastroenterólogo con ardor de estómago y regurgitación de líquidos. El paciente, por lo demás sano, sufre cada vez más las dolencias.
Antecedentes: Una paciente de 40 años acudió al gastroenterólogo con acidez creciente y regurgitación de líquidos. Los síntomas siempre se producían después de una comida suntuosa y durante el estrés del viaje. El paciente, por lo demás sano, no había recibido tratamiento anteriormente.
Historia clínica y diagnóstico: La historia clínica complementaria reveló que la paciente tenía un IMC de 30, un factor de riesgo para el reflujo, pero por lo demás no tomaba ninguna medicación y no tenía comorbilidades adicionales. Se realizó una endoscopia para aclarar las molestias. Se diagnosticó esofagitis por reflujo leve (grado A de la clasificación de Los-Angeles), con una pequeña hernia hiatal axial.
Terapia/progresión: A la paciente se le prescribió una terapia combinada con un inhibidor de la bomba de protones y alginato (40 mg de esomeprazol más alginato, una vez al día). Con este tratamiento, la paciente estaba libre de síntomas al cabo de cuatro semanas. Posteriormente, se suspendió la toma del inhibidor de la bomba de protones y la paciente no ha tomado ningún inhibidor de la bomba de protones desde entonces. En su lugar, se realiza un tratamiento con alginato según sea necesario, al que el paciente responde bien subjetivamente.
Comentario del Dr. med. Marcel Halama: El presente caso muestra una esofagitis por reflujo leve que se vio favorecida por los dos factores de riesgo hernia hiatal axial y obesidad. Para los pacientes con esofagitis por reflujo leve, tras una terapia inicial con inhibidores de la bomba de protones, tomar alginato según sea necesario es una buena opción de tratamiento.