La migraña, junto con la cefalea tensional, es uno de los más comunes de los más de 240 tipos de cefalea y limita considerablemente la calidad de vida y la vida cotidiana de los afectados. Sin embargo, esta compleja enfermedad sigue estando a menudo infravalorada y, en consecuencia, infratratada. La gestión eficaz de la terapia y la profilaxis optimizada están indicadas, especialmente para las formas graves de migraña.
En los últimos años, la mejora de la caracterización y el diagnóstico de los rasgos clínicos ha permitido considerar la migraña de forma más diferenciada como una enfermedad compleja. Una consecuencia de ello es un régimen terapéutico mejor y adaptado individualmente. Para la terapia aguda, se dispone de analgésicos, que solos o en combinación con, por ejemplo, cafeína, pueden frenar bien los ataques leves de dolor. Los triptanes se han desarrollado para el dolor de moderado a intenso. Imitan la función del neurotransmisor serotonina en el cerebro.
Triptanos para terapia aguda
Por regla general, las pastillas se prescriben de forma estándar. Sin embargo, los triptanes también están disponibles en forma de comprimidos fundentes, aerosol nasal o inyección s.c.. Dependiendo de la galénica, el efecto se produce con diferente velocidad y fuerza. Para lograr un alivio eficaz del dolor, debe tomarse lo antes posible. Y precisamente esto es a menudo un problema. No es raro que los pacientes de migraña se despierten por la mañana, ya en pleno ataque de dolor. O los síntomas acompañantes, como las náuseas y los vómitos, son tan graves que tomar comprimidos está fuera de lugar. También hay que recordar que la motilidad intestinal se reduce durante la migraña, lo que dificulta la absorción. Los estudios han demostrado que aproximadamente la mitad de los pacientes que reciben tratamiento oral para la migraña aguda no sienten dolor dos horas después de tomarlo. Un porcentaje aún mayor no está satisfecho con el efecto del tratamiento. En este caso, debería considerarse antes un cambio a otra forma farmacéutica. La administración subcutánea, en particular, presenta ventajas, ya que evita el paso gastrointestinal y permite un rápido inicio de la acción.
Ataques de migraña severa bajo control
Una terapia aguda inadecuada puede tener consecuencias de largo alcance. No es infrecuente que el uso excesivo de analgésicos provoque dolores de cabeza inducidos por éstos. Este fenómeno está presente en el 75% de todos los pacientes con migraña crónica. Es importante eliminar progresivamente los analgésicos como primer paso y después iniciar una profilaxis eficaz. También puede considerarse un tratamiento preventivo para los pacientes con una mayor frecuencia de ataques. Ésta debe ser multimodal e incluir cambios en el estilo de vida y el comportamiento, así como una atención farmacológica eficaz. Además de los antidepresivos, anticonvulsivos, betabloqueantes, antagonistas del calcio y sustancias naturales, recientemente se dispone de anticuerpos contra el CGRP para este fin. Se caracterizan por abordar específicamente la fisiopatología de la migraña. La liberación de neurotransmisores excitatorios como el péptido relacionado con el gen de la calcitonina (CGRP) desencadena una inflamación perivascular que estimula las fibras C nociceptivas aferentes. Éstas transmiten la señal de vuelta al nervio trigémino. Comienza un círculo vicioso. Al bloquear los receptores de CGRP, el dolor de la migraña puede contrarrestarse de antemano con gran eficacia.
Fuente: Congreso Alemán del Dolor
InFo NEUROLOGY & PSYCHIATRY 2020; 18(6): 28 (publicado el 28.11.20, antes de impresión).