En el 1er Congreso Suizo de Terapia Holística del Dolor, la atención se centró por una vez en temas distintos a la medicación, las intervenciones y el control de los efectos secundarios en relación con el dolor. Expertos de distintas disciplinas como la psicología, la neurología, la odontología, la fisioterapia, la rehabilitación, etc. informaron sobre aspectos específicos de la experiencia del dolor – y sobre cómo trabajar terapéuticamente con los pacientes. Informamos sobre tres conferencias.
(ee) Lic. phil. Roberto Brioschi, Jefe del Centro del Dolor/Psicosomática, RehaClinic Zurzach, ofreció una amena charla sobre “La resistencia en la terapia del dolor”. Básicamente, es más fácil no “saber” una información irrelevante pero aterradora que volver a olvidarla. Esto también se aplica a la sensación de dolor, porque el dolor es principalmente -según la definición de la ISAP- ¡una sensación desagradable y emocional! Como terapeuta, es importante percibir las quejas del paciente antes de interpretar.
Vencer la resistencia con conversaciones sobre coches
Para los pacientes, el dolor es una interrupción constante de la atención y la concentración. Por eso el dolor no sólo duele, sino que también altera la vida normal o el organismo. las actividades de la vida cotidiana. Por lo tanto, hay que preguntarse específicamente en la anamnesis de qué manera el dolor entorpece al paciente: ¿Cómo le molesta el dolor? ¿Cuáles son las consecuencias? ¿Qué es lo que ya no puede hacer?
En el tratamiento, es importante llegar al paciente con dolor allí donde tiene interés y capacidad. El ponente describió un ejemplo impresionante de un paciente italiano con hernia discal. El terapeuta supo explicarle bien la enfermedad comparando el disco intervertebral con el amortiguador de un coche. Y para motivar al paciente a moverse más, el terapeuta le hizo la siguiente pregunta: ¿Qué le ocurre a un coche cuando sólo está aparcado en el garaje y no se conduce? ¿se mueve?
La conferencia de Roberto Brioschi transmitió sobre todo dos mensajes prácticos para llevar a casa: “Hay que hacerle la competencia al dolor de cabeza” y “Como terapeuta, no hay que pensar en si el paciente lo quiere o no, sino simplemente empezar a trabajar con él”.
Con ejercicio contra el dolor crónico
Balz Winteler, fisioterapeuta del Instituto de Fisioterapia del Inselspital de Berna, arrojó luz sobre la cuestión de cómo el ejercicio puede tener un efecto aliviador sobre el dolor crónico. En Suiza, el 10% de la población padece dolores de espalda o lumbago severos, y un número similar, dolores articulares severos. 670 000 trabajadores se ven afectados por dolencias musculoesqueléticas, las mujeres con más frecuencia que los hombres. Los costes consecuentes para la economía son enormes: se pierden 3.300 millones de francos suizos debido a la reducción de la productividad. El número de hospitalizaciones por dolor de espalda y articulaciones ha aumentado significativamente desde 2002: 17% en hombres, 24% en mujeres. Las causas de las dolencias son enfermedades, malformaciones, accidentes y sobrecargas, factores socioeconómicos y psicosociales (estrés) y también la falta de ejercicio.
En nuestra sociedad, las personas mayores y las mujeres en particular no hacen suficiente ejercicio, y cerca de un tercio de la población mundial es insuficientemente activa. La falta de actividad física aumenta significativamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes, problemas articulares, etc. Por lo tanto, las intervenciones que promueven la actividad física también contribuyen de forma importante a la prevención primaria y secundaria. Un estudio conjunto del Inselspital y la Universidad de Ciencias Aplicadas de Berna demostró que el entrenamiento complementario de marcha nórdica mejoraba el rendimiento cotidiano en personas con enfermedades psicosomáticas.
Los pacientes con dolor de espalda crónico forman un grupo muy poco homogéneo con diferentes patrones de comportamiento. Para mejorar el tratamiento, los estudios buscan subgrupos homogéneos para administrarles una terapia específica. Por ejemplo, se distinguen tres estrategias diferentes de afrontamiento del dolor: “disfuncionales” (pacientes con mucha ansiedad y conductas de evitación), “de adaptación” (pacientes que se adaptan al dolor pero a veces se sobrecargan) y “de angustia interpersonal” (pacientes con conflictos en las relaciones como consecuencia del problema del dolor). La terapia específica para un subgrupo podría aportar beneficios adicionales en términos de funcionalidad y reducción del dolor. Un estudio correspondiente realizado en Zurzach demostró que la terapia específica reducía el grado de discapacidad y la intensidad del dolor en el subgrupo “disfuncional”.
- Las siguientes intervenciones tienen una eficacia científicamente probada:
- Combinación de terapia de ejercicio activo con instrucciones al paciente para que se mantenga físicamente activo.
- El ejercicio regular es importante; el tipo de ejercicio no es esencial, no tiene por qué ser “extenuante”.
- En caso de dolor que dure más de 6-12 semanas, debe remitirse a un equipo interprofesional del dolor en una fase temprana.
“También es importante centrarse en el empoderamiento efectivo de los enfermos a la hora de enfrentarse a la enfermedad del dolor”, subrayó el ponente.
Imágenes por resonancia magnética funcional para el dolor dental
PD Dr. med. y Dr. med. dent. Dominik Ettlin, del Centro de Medicina Dental de la Universidad de Zúrich, presentó un método para hacer “visible” el dolor con imágenes. Para ello, se expone a los voluntarios a un estímulo de dolor en los dientes. Los dientes son muy adecuados para ello porque la pulpa dental, que está formada por un 90% de fibras del dolor, sólo puede sentir dolor, pero no temperatura ni presión, por ejemplo. Por lo tanto, se puede desencadenar una sensación de dolor con diferentes estímulos (vibración, corriente eléctrica, corriente de aire) si la intensidad del estímulo supera el umbral del dolor. Cuando se aplican estímulos dolorosos, se activan diferentes áreas cerebrales implicadas en el procesamiento de la percepción sensorial, la experiencia emocional y el procesamiento cognitivo. Con la resonancia magnética funcional se pueden representar las activaciones de estas regiones cerebrales (medición de la intensidad del flujo sanguíneo en las distintas áreas cerebrales) y correlacionarlas con las sensaciones del sujeto.
Los hallazgos son valiosos en varias áreas, especialmente para medir el tamaño del efecto de las intervenciones contra el dolor. Por ejemplo, las empresas están interesadas en saber qué dentífricos alivian mejor el dolor de los cuellos de dientes sensibles. Visualizando el dolor de muelas, es posible objetivar si se puede conseguir un efecto con los productos correspondientes. Otra posible aplicación es identificar aquellas zonas del cerebro en pacientes con dolor de muelas crónico en las que el tratamiento con estimulación cerebral profunda podría suponer un alivio.
Fuente: 1er Congreso Suizo de Terapia Holística del Dolor, 8 de noviembre de 2014, Zúrich.
PRÁCTICA GP 2014; 9(12): 40-41