Pregunta de la investigación: El objetivo del estudio realizado en el Reino Unido era caracterizar sociodemográfica y clínicamente a las personas que han sufrido la trata y padecen trastornos psiquiátricos graves.
Antecedentes
Se han realizado pocos estudios sobre la salud mental de las personas víctimas de la trata. Lo único que se sabe es que los trastornos afectivos y los traumatismos se dan con una alta prevalencia entre ellos.
Pacientes y metodología
En este estudio de cohortes se incluyó a las personas que entraron en contacto con los servicios de salud mental de Londres entre enero de 2006 y julio de 2012. Se examinaron los historiales electrónicos de más de 200.000 pacientes. Además, se “emparejaron” y compararon las características sociodemográficas y clínicas de las víctimas de la trata con las de las personas que no lo habían sido.
Resultados
Fue posible encontrar a 133 personas que habían sufrido la trata de seres humanos (incluidos 37 niños). La mayoría de los adultos (81%) y de los niños (68%) eran mujeres. Entre los niños, la explotación sexual desempeñó el papel principal (51%). Los diagnósticos más comunes en general fueron los trastornos afectivos, por ejemplo, el trastorno por estrés postraumático (TEPT), los trastornos relacionados con el estrés y los trastornos de adaptación. El abuso físico y sexual aún podía encontrarse en un elevado número de afectados. Las personas que sufrieron la trata también tuvieron un número significativamente mayor de ingresos obligatorios en atención psiquiátrica que los participantes del grupo de control. No se pudo encontrar ninguna asociación entre el tráfico y los trastornos por consumo de sustancias.
Conclusiones de los autores
Las enfermedades psiquiátricas graves entre las víctimas de la trata se asocian a más ingresos en centros de atención psiquiátrica, así como a tasas más elevadas de malos tratos. Se necesitan intervenciones más eficaces para este grupo de pacientes tan vulnerable.
Comentario
Se trata de un trabajo muy importante de Oram y sus colegas, ya que el tema de la trata de seres humanos (y la miseria de los refugiados) vuelve a estar de actualidad en Europa. El elevado número de mujeres y niños afectados es alarmante. Como era de esperar, los trastornos relacionados con el estrés y los trastornos afectivos fueron los más frecuentes. Lo sorprendente, sin embargo, es que se dice que hay menos trastornos por consumo de sustancias entre las personas que han experimentado la trata. Esto puede deberse a varias razones: Por un lado, los datos del estudio eran en parte incompletos. La razón principal, sin embargo, es probablemente que los pacientes con trastornos por consumo de sustancias suelen estar muy avergonzados y autoestigmatizados, por lo que a menudo no quieren informar abiertamente de su consumo “real” en las primeras entrevistas. Por lo tanto, en futuros estudios deberán utilizarse otros métodos para objetivar mejor los trastornos por consumo de sustancias en los pacientes (por ejemplo, análisis capilares). Una mejor objetivación no pretende condenar a los pacientes, sino ayudar a diagnosticar y tratar con mayor eficacia a los grupos de pacientes vulnerables.
InFo NEUROLOGÍA Y PSIQUIATRÍA 2016; 14(2): 30