La insuficiencia cardiaca diastólica es el espectro de la cardiología. Hasta el momento, no existe ningún concepto terapéutico concluyente que mejore el mal pronóstico de los afectados. Se investigaron muchos enfoques terapéuticos prometedores que tuvieron que ser descartados. Esto podría cambiar ahora con los resultados del estudio EMPEROR. Por primera vez se obtuvieron resultados positivos.
La insuficiencia cardiaca diastólica (IC-FEp) es igualmente frecuente y constituye una afección tan grave como la insuficiencia cardiaca sistólica (IC-FEr). Sin embargo, todavía no existe ningún tratamiento farmacológico que pueda mejorar el pronóstico a largo plazo. En pacientes con una fracción de eyección reducida, los inhibidores de SGLT2 pueden utilizarse ahora con éxito para reducir los ingresos hospitalarios por insuficiencia cardiaca. Sobre esta base, el estudio EMPEROR-Preserved investigó si la empagliflozina también es eficaz en pacientes con insuficiencia cardiaca con fracción de eyección preservada.
Este estudio ocupa el tercer lugar entre los grandes ensayos de insuficiencia cardíaca de este inhibidor de SGLT2. El primero fue el EMPA-REG OUTCOME en pacientes con diabetes de tipo 2, que demostró una reducción significativa de los acontecimientos cardiovasculares graves (muerte cardiovascular, infarto de miocardio o ictus), así como de las hospitalizaciones por muerte cardiovascular e insuficiencia cardiaca. El segundo ensayo fue EMPEROR-Reduced, que demostró que la empagliflozina era eficaz en la insuficiencia cardiaca con fracción de eyección reducida independientemente de la presencia de diabetes. Ahora se han presentado los datos en pacientes con insuficiencia cardiaca diastólica.
El criterio de valoración combinado se alcanza con una frecuencia significativamente menor
5988 pacientes con insuficiencia cardiaca de clase II-IV y una fracción de eyección superior al 40% recibieron 10 mg de empagliflozina o placebo una vez al día, además del tratamiento estándar de base. El criterio de valoración primario fue la combinación de muerte cardiovascular y hospitalización por insuficiencia cardiaca. Tras una mediana de seguimiento de 26,2 meses, un número significativamente menor de pacientes del grupo del inhibidor de SGLT2 había alcanzado el punto final que los del grupo placebo (13,8% frente a 17,1%). Esto corresponde a una reducción del riesgo del 21%. Este efecto se debió principalmente a un menor riesgo de hospitalización por insuficiencia cardiaca en el grupo de empagliflozina.
Los beneficios se extendieron a todos los subgrupos, independientemente de la fracción de eyección ventricular izquierda (FEVI), el estado diabético o el sexo del paciente. No se produjeron nuevas señales de seguridad con un perfil general de seguridad bueno.
Congreso: ESC digital 2021
CARDIOVASC 2021; 20(3): 38 (publicado el 8.9.21, antes de impresión).
PRÁCTICA GP 2021; 16(9): 44