Los GIST se encuentran con mayor frecuencia en el estómago y el intestino delgado. Un nuevo análisis exhaustivo de la base de datos SEER (Vigilancia, Epidemiología y Resultados Finales) de EE.UU. muestra: Contrariamente al dogma popular, el pronóstico en los pacientes que padecen un GIST del intestino delgado no es peor que en los que padecen un GIST del estómago. ¿Qué significa este hallazgo para el tratamiento de los tumores correspondientes?
El equipo de investigación suizo evaluó los datos de 3011 adultos con GIST gástrico, 313 con GIST duodenal, 1288 con GIST de yeyuno/ileon, 139 con GIST colónico, 172 con GIST rectal y 173 casos extraintestinales. El resultado es una muestra total de 5096 pacientes (mediana de 62 años y la mitad mujeres). La base del análisis fue la base de datos SEER estadounidense de 1998 a 2011. La mediana del periodo de observación fue de 37 meses.
La diferencia de mortalidad es menor de lo previsto
Resultó que la supervivencia entre los tumores correspondientes del estómago y del intestino delgado no difería tanto como se suponía.
- Los análisis multivariantes, que incluían el tamaño del tumor, el estadio y la edad, hallaron una limitación de la supervivencia en los GIST duodenales y yeyunales/ileales comparable a la de los GIST gástricos. El cociente de riesgo de muerte en casos generales frente a casos gástricos en el GIST duodenal fue de 0,95, y el de muerte específica por cáncer fue de 0,99. Los valores correspondientes para los tumores del yeyuno/ileon fueron de 0,97 y 0,95.
- El pronóstico de los tumores estromales del recto tampoco fue peor que el de los casos correspondientes de la zona del estómago.
- Por el contrario, la supervivencia se redujo significativamente (p<0,001) para los GIST en la región del colon y el peritoneo: El riesgo de mortalidad general aumentó un 40% en los GIST de colon en comparación con los tumores gástricos, y el riesgo de mortalidad específico del cáncer incluso aumentó un 89%. En el caso de la localización extraintestinal, el peor pronóstico se reflejó en un aumento del riesgo del 42% y del 43%.
- Otros factores que provocaron una peor supervivencia específica del cáncer fueron el tamaño del tumor superior a 10 cm, las metástasis a distancia y en los ganglios linfáticos y la edad avanzada.
¿Reconsiderar el procedimiento para el GIST del intestino delgado?
Los resultados sugieren que el pronóstico menos favorable de los GIST no gástricos se debe en gran medida a los tumores de colon y extraviscerales, más que a los GIST de intestino delgado y recto. Por lo tanto, en general no se puede suponer un peor resultado con los tumores del estroma intestinal. También deberían reconsiderarse las clasificaciones de riesgo que atribuyen un mayor riesgo de muertes relacionadas con el tumor al GIST de intestino delgado, por ejemplo. Esto a su vez tiene implicaciones para la terapia adyuvante. ¿Está realmente más indicado aquí que para un GIST gástrico? Y a la inversa, ¿tuvo quizá la terapia adyuvante algún impacto en los resultados del presente estudio? Los investigadores hicieron un seguimiento y llegaron a la misma conclusión basándose en los datos anteriores a 2005, cuando la terapia adyuvante con imatinib no era habitual en los GIST: los GIST de intestino delgado y recto presentan una supervivencia comparable a la de los GIST gástricos.
Fuente: Guller U, et al.: Revisiting a dogma: similar survival of patients with small bowel and gastric GIST. Un análisis SEER de puntuación de propensión basado en la población. Cáncer gástrico 2017; 20(1): 49-60.
InFo ONCOLOGÍA Y HEMATOLOGÍA 2017; 5(2): 3