Se podría suponer que las plantas medicinales no tienen cabida en la práctica oncológica. Y de hecho, aparte de la terapia con muérdago de la medicina antroposófica, no existe ninguna planta medicinal occidental con potencial antitumoral. Sin embargo, numerosas aplicaciones a base de plantas pueden aliviar las dolencias relacionadas con la quimioterapia o la radioterapia. A continuación se presentan algunas de estas aplicaciones.
Ningún científico serio afirma que se puedan tratar o curar las enfermedades tumorales con mezclas o tinturas de hierbas – aparte de los (co)tratamientos con preparados de muérdago promovidos por los círculos antroposóficos.
Sin embargo, si se considera todo el espectro de la oncología y se tienen en cuenta todas las posibilidades de la medicina paliativa y de apoyo, no cabe duda de que las plantas medicinales pueden desempeñar un papel en estos ámbitos que no debe subestimarse. Especialmente como medidas de apoyo para la prevención y el tratamiento de los efectos adversos asociados a la terapia oncológica, ciertas hierbas medicinales y otras medidas integradoras resultan a menudo idóneas.
Sociedad de Oncología Integral
En EE.UU., donde la fitoterapia suele pasarlo mal, se fundó sorprendentemente una sociedad de oncología integrativa: La Sociedad de Oncología Integral (SIO) (www.integrativeonc.org). Fundada en 2003, esta sociedad multidisciplinar e internacional pretende reunir a un amplio abanico de profesionales implicados en el tratamiento, los cuidados y el apoyo a los pacientes oncológicos. Esto incluye a especialistas en oncología convencional, pero también a médicos que trabajan en medicina complementaria, nutricionistas, psicólogos, etc. En intensa cooperación, la SIO ha elaborado directrices para la oncología holística, por ejemplo, las directrices publicadas en 2009 centradas en los “productos botánicos” [1]. En EE.UU., por ejemplo, los medicamentos a base de plantas se denominan “aditivos alimentarios” o “herbales”, porque allí las plantas medicinales no pueden registrarse como medicamentos. Por desgracia, en lo que respecta a los preparados a base de plantas, estas directrices se refieren principalmente a las posibles interacciones con los preparados sintéticos y menos a los beneficios.
en el tratamiento de dolencias relacionadas con la terapia, como se muestra a continuación.
Terapia del muérdago
La terapia del muérdago, promovida por los círculos antroposóficos, no se tratará aquí en detalle, ya que no forma parte de la fitoterapia tradicional, sino que es un tipo de tratamiento antroposófico. Existen numerosos estudios sobre la eficacia de los preparados de muérdago. En el pasado se han investigado el tiempo de supervivencia, la frecuencia y/o duración de las remisiones y, más recientemente, la calidad de vida de los pacientes con cáncer tratados con preparados de muérdago [2,3]. Estos estudios muestran una mejora significativa de la calidad de vida.
En Suiza están autorizados dos tipos de preparados de muérdago: Iscador® y Helixor®. La mayoría de los estudios se han realizado con los primeros.
Mucositis
La mucositis es un efecto secundario muy común de la quimioterapia y la radioterapia que afecta a las membranas mucosas de la boca y la garganta y puede afectar a las encías, la lengua, la faringe, la laringe y/o el esófago. La mucositis se manifiesta como enrojecimiento, edema, atrofia, ulceración y hemorragia.
En la 21ª Conferencia Suiza de Fitoterapia, celebrada el 23 de noviembre de 2006, se presentaron en una ponencia opciones fitoterapéuticas para tratar estas dolencias [4]. Sólo existen unos pocos estudios clínicos controlados que documenten la eficacia de las aplicaciones que se presentan a continuación. Sin embargo, según el ponente, el uso de extractos fitoterapéuticos y preparados de té en la profilaxis y la terapia de la mucositis bajo tratamiento antitumoral desempeña un papel esencial, incluso en centros de oncología que, por lo demás, sólo tienen una orientación convencional.
Salvia (Salvia officinalis): Gracias a los ingredientes astringentes, antiflogísticos, bactericidas, fungostáticos y virostáticos como la tuyona, el cineol, el alcanfor, los di- y triterpenos, los flavonoides y los derivados del ácido cafeico de la salvia, los preparados correspondientes son adecuados para el tratamiento de la mucositis en forma de enjuagues, cepillos o gargarismos.
Manzanilla (Matricaria recutica): Los principales ingredientes de la manzanilla son el aceite esencial, los flavonoides y el mucílago, que también son adecuados para el tratamiento de lesiones en la zona de la boca y la garganta gracias a su actividad antiflogística, cicatrizante, bacteriostática y fungistática.
Caléndula (Calendula officinalis): Las tinturas de caléndula contienen glucósidos triterpénicos, flavonoides, carotenoides, polisacáridos y aceite esencial. Tienen efectos antimicrobianos y antiflogísticos, favorecen la cicatrización de heridas y estimulan el sistema inmunológico.
Hamamelis (Hamamelis virginiana): Los extractos de la corteza y las hojas tienen un efecto antiflogístico y astringente, por lo que son adecuados para tratar la mucositis.
Otros as tringentes: Existen otras plantas medicinales con un pronunciado efecto astringente. Entre ellas figuran la sanguinaria (Potentilla tormentilla), la mirra (Commiphora molmol) y la ratania (Krameria triandra). Existen los correspondientes preparados comerciales como enjuagues o cepillos.
Xerostomía
Otro problema que se produce como consecuencia de la radioterapia en pacientes oncológicos es el deterioro de la función de las glándulas salivales. Esto provoca una sequedad bucal muy desagradable. Muchos pacientes tienen dificultades para hablar y su sentido del gusto está alterado. También puede haber pérdida de apetito.
Los medicamentos amargos, cuyos ingredientes amargos estimulan la secreción de las glándulas salivales, pueden utilizarse para tratar este problema. Existen preparados comerciales en forma de gotas que contienen las plantas medicinales correspondientes, como la centaurea (Centaurium umbellatum), la genciana (Gentiana lutea), el ajenjo (Artemisia absinthium), etc. Estas plantas medicinales también pueden recetarse individualmente como tintura o tintura madre.
Hepatotoxicidad
Algunos fármacos oncológicos también tienen potencial hepatotóxico. En 2010 se publicó un estudio que examinaba el efecto del cardo mariano (Silybum marianum) en niños con leucemia linfoblástica aguda [5]. En este estudio aleatorizado, controlado con placebo y doble ciego, 50 niños con leucemia linfoblástica aguda y hepatotoxicidad inducida por la quimioterapia recibieron un preparado de cardo mariano o un placebo. Tras 56 días de tratamiento, el grupo de verum mostró una hepatotoxicidad significativamente menor que el grupo de comparación.
Fitoterapia no occidental
En los últimos años han aparecido numerosos informes sobre plantas de fitoterapia no occidental. Por ejemplo, un estudio demostró que los extractos de Garcinia mangostona, un árbol que crece en la península malaya, tienen propiedades anticancerígenas in vitro [6].
Un estudio publicado en 2010 informó de la eficacia de varias plantas medicinales de la medicina kampo originaria de Japón en el tratamiento de los efectos secundarios relacionados con la quimioterapia [7].
Ese mismo año se publicó un estudio que demostraba que la planta medicinal china Rhodiola algida tiene un efecto positivo sobre la mucositis inducida por la quimioterapia en pacientes con cáncer de mama [8]. Esta planta medicinal pertenece al mismo género que la Rhodiola rosea (raíz de rosa), que se utiliza en la fitoterapia occidental contra los síntomas del estrés.
Resumen
Aparte de los preparados de muérdago utilizados en la medicina antroposófica, no existen plantas medicinales occidentales con efecto anticancerígeno. Sin embargo, numerosos preparados a base de plantas pueden aliviar las molestias relacionadas con el tratamiento de los tumores. Entre ellos se incluyen, en particular, la mucositis, la xerostomía y la hepatotoxicidad.
Literatura:
- Deng CE, et al: Directrices prácticas de oncología integrativa. Guías de práctica clínica basadas en la evidencia para la oncología integrativa: terapias complementarias y productos botánicos. J Soc Integr Oncol 2009; 7(3): 85-120.
- Tröger W, et al.: La terapia adicional con producto de muérdago durante la quimioterapia adyuvante de pacientes con cáncer de mama mejora la calidad de vida: un ensayo clínico piloto aleatorizado abierto. Medicina complementaria y alternativa basada en la evidencia 2014. doi: 10.1155/2014/430518.
- Tröger W, et al.: Calidad de vida de los pacientes con cáncer de páncreas avanzado bajo terapia de muérdago. Deutsches Ärzteblatt 2014; 111(29-30): 493-502.
- Rostock M: La fitoterapia en la prevención y terapia de la mucositis en pacientes tumorales. Ponencia 21ª Conferencia Suiza sobre Fitoterapia, Baden, 23.11.2006. Artículo publicado en: phyotherapie 2007; 7(1): 26-29.
- Ladas EJ, et al: Estudio piloto, doble ciego, aleatorizado y controlado del cardo mariano para el tratamiento de la hepaotxicidad en la leucemia linfoblástica aguda (LLA) infantil. Cáncer 2010; 116(2): 506-513.
- Pan-In P, et al: Tráfico celular y actividad anticancerígena de nanopartículas poliméricas encapsuladas con extracto de Garcinia mangstona. Int J Nanomedicine 2014; 9: 3677-3686.
- Ohnishi S, Takeda H: Hierbas medicinales para el tratamiento de los efectos secundarios inducidos por la quimioterapia contra el cáncer. Front Pharmacol 2015; 6: 14.
- Loo WT, et al: La Rhodiola algida mejora la mucositis oral inducida por la quimioterapia en pacientes con cáncer de mama. Expert Opin Investig Drugs 2010; 19(Suppl 1): 91-100.
PRÁCTICA GP 2015; 10(7): 4-5