La PRT guiada por TC se ha convertido en un reconocido procedimiento mínimamente invasivo de terapia del dolor de columna. Es un procedimiento eficaz, de bajo riesgo y con pocos efectos secundarios que puede realizarse de forma ambulatoria. Con una media de 3 a 5 tratamientos a intervalos de unas tres semanas, se puede conseguir una reducción relevante y duradera del dolor o la ausencia del mismo en cerca del 80% de los pacientes.
Las enfermedades del sistema musculoesquelético se encuentran entre los problemas de salud que suponen una mayor carga económica para las economías de los países desarrollados. La obesidad y la falta de ejercicio provocan importantes cambios degenerativos en el aparato musculoesquelético con síndromes de dolor. El 25% de los casos son de curso crónico progresivo. Las mujeres se ven afectadas con más frecuencia que los hombres. En la sexta y séptima década de la vida se observa una disminución gradual de la frecuencia de la enfermedad.
En la actualidad, los dolores relacionados con la columna vertebral se desplazan cada vez a grupos de edad más jóvenes. Ya entre los 10 y los 17 años, cerca del 70% de los niños y adolescentes se quejan de problemas del tronco esquelético que interfieren en la vida cotidiana.
Tras el artículo sobre la extrusión discal con síntomas radiculares, cabe mencionar hoy la posibilidad de una terapia perirradicular mínimamente invasiva guiada por TC (TC-PRT).
En el dolor radicular agudo, tras unas 6 a un máximo de 8 semanas de terapia conservadora multimodal con medidas medicinales, físicas y fisioterapéuticas, se indica un tratamiento mínimamente invasivo si no hay contraindicación. Los síntomas clínicos deben correlacionarse con los hallazgos de las imágenes transversales.
El objetivo terapéutico de todas las medidas de tratamiento es reducir el dolor hasta que el paciente esté libre de dolor, para permitirle volver completamente o al menos parcialmente a la vida cotidiana normal, a sus actividades laborales y sociales. Con las terapias mínimamente invasivas controladas radiológicamente, se han establecido modalidades que son de bajo riesgo, eficaces, persistentemente analgésicas y pueden considerarse significativamente más rentables en comparación con las medidas conservadoras a largo plazo o los tratamientos hospitalarios. Hace unos 25 años, se comprendió que las intervenciones quirúrgicas podían así evitarse en muchos casos. Mientras tanto, diversos estudios respaldan estas afirmaciones de que se puede conseguir una reducción duradera del dolor con una tasa de complicaciones de la CT-PRT inferior al 1%. Hasta el 95% de los pacientes se beneficiaron con una reducción significativa del dolor durante una media de 9 meses.
Los aspectos jurídicos han cobrado cada vez más importancia, especialmente en las medidas de intervención. Incluso si la terapia se lleva a cabo de forma técnicamente impecable sin complicaciones, puede haber consecuencias legales si el tratamiento no se explicó adecuadamente. El Panorama 1 ofrece información sobre los aspectos más importantes.
Aclaraciones: qué tener en cuenta
- la información debe facilitarse con la debida antelación; las circunstancias de una urgencia con información facilitada inmediatamente antes del procedimiento no pueden invocarse para la terapia perirradicular como tratamiento electivo
- Información exhaustiva sobre la aplicación, los riesgos específicos, las posibles consecuencias y las alternativas de la terapia
- Las hojas de información prefabricadas pueden facilitar la información, pero no sustituyen a la información personal por parte del médico tratante; en caso de delegación a un colega médico, debe garantizarse que la información cumple los requisitos; no se permite la delegación de la información al MTAR o al asistente médico. Los aspectos individuales de la información deben documentarse en hojas de información estandarizadas y ser firmadas por el médico informador y el paciente una vez proporcionada la información. En este contexto, el paciente debe ser capaz de comprender el significado y las consecuencias de su decisión, lo que no requiere ni capacidad de derecho civil ni culpabilidad de derecho penal, sino capacidad de discernimiento y juicio en el “sentido natural”.
- Se aplica lo siguiente: la información debe proporcionarse de manera oportuna, completa, individual y comprensible.
La información puede omitirse si el paciente declara enfáticamente y por escrito que no desea información.
Las indicaciones clásicas de la PRT guiada por TC no han cambiado a lo largo de los años y se enumeran en el resumen 2.
La técnica, que se remonta a Macnab, y el curso del tratamiento también representan procedimientos estandarizados.
El tratamiento de las raíces nerviosas vertebrales guiado por TC, puede realizarse como técnica de inyección perirradicular, extraespinal o como aplicación de fármacos epidurales intraespinales. El tratamiento puede realizarse sin aguja guía para distancias cortas desde la superficie de la piel hasta el nervio, y con aguja guía para distancias más largas, es decir, utilizando la técnica coaxial. Este problema se encuentra ocasionalmente en la CT-PRT de pacientes obesos, también en la columna cervical.
Las contraindicaciones de la terapia se resumen en el resumen 3, la descripción detallada puede encontrarse en la bibliografía citada.
Para saber más:
- Grönemeyer DHW, Thiel HJ, Moser C: Microterapia perirradicular tomográfica. ABW Wissenschaftsverlag GmbH, Berlín; 2013.
- Thiel HJ: PRT guiada por TC para MTRA. ABW Wissenschaftsverlag GmbH, Berlín; 2014.
- aerzteblatt.de, 13.11.2013
- Thiel HJ: Terapia perirradicular guiada por TC: lo último en planificación y aplicación. tecnología radiológica 1/2018: 4-7.
PRÁCTICA GP 2019; 14(12): 25-27