En la actual pandemia de COVID 19, se han tomado diversas medidas para minimizar el número de contactos directos médico-paciente. Sin embargo, esto se vuelve difícil cuando se utiliza la inmunoterapia con alérgenos (ITA), cuya regularidad conlleva muchas visitas al ambulatorio. Aquí se requiere el máximo nivel de protección tanto para los pacientes como para el personal sanitario.
Un enfoque en este sentido lo ofrecen las soluciones sanitarias digitales, en particular el uso de la telemedicina (TM), que ya se ha propuesto en el pasado como una herramienta útil para prestar servicios médicos a distancia cuando no es posible la presencia física. Sin embargo, a menudo ha habido una falta de aceptación, también por parte de los médicos. Desarrolladas originalmente con el objetivo de ampliar el acceso a los servicios sanitarios, especialmente en las zonas rurales, estas tecnologías han cobrado ahora un impulso considerable en tiempos de Corona.
Muchos aspectos positivos
En un estudio real, se ofreció telemedicina a pacientes con rinitis alérgica inducida por polen de gramíneas para la fase de aumento de dosis [1]. En 6 consultas de alergología del área Rin-Meno y el Centro de Alergia de Wiesbaden, se administró un producto en investigación a adultos con rinitis alérgica inducida por el polen de gramíneas (n=73). La duración del estudio fue de aproximadamente 8 semanas por paciente, y se ofreció diariamente una consulta telemédica con cita previa. En el proceso, se llevó a cabo un registro de la evaluación del paciente tanto de los aspectos telemédicos como de los aspectos del tratamiento SLIT, y se realizó una evaluación global.
La oferta de telemedicina fue percibida muy positivamente por los pacientes, afirman los autores del Centro de Rinología y Alergología de Wiesbaden, la Clínica Universitaria de Otorrinolaringología de Maguncia y dos consultas de grupo de Otorrinolaringología de Taunusstein y Maguncia-Kastel. Entre los aspectos positivos más mencionados se encuentran la ventaja del distanciamiento social, es decir, evitar el contacto directo, el ahorro de tiempo debido a la eliminación de los desplazamientos y los tiempos de espera y la comodidad (Fig. 1). Las expectativas de los pacientes respecto a la TM se cumplieron en su mayoría y la mayoría se mostró interesada en continuar con la oferta.
Contacto más estrecho que en una consulta cara a cara
La motivación para iniciar la SLIT en absoluto se consideró mayor con la TM ofrecida por la mitad de los pacientes. Curiosamente, según los autores, casi el 75% informó de un “contacto más estrecho con los médicos asistentes” que en la consulta presencial. En su mayoría, las personas sometidas a la prueba darían una recomendación positiva para otros pacientes. La probabilidad de continuar con el SLIT con TM durante un periodo de tiempo más largo fue valorada positivamente por el 94%. Sin embargo, ni un solo paciente deseaba la supresión de las consultas presenciales en alergología y sólo la telemedicina.
- Congreso Alemán de Alergia 2020, Wiesbaden (D)
Fuente:
- Alali A, Kondic V, Thieme C, et al: La telemedicina es útil para aumentar la dosis de SLIT con un comprimido de 5 gránulos en condiciones de pandemia de COVID-19. Congreso Alemán de Alergia 2020, P7.12
InFo NEUMOLOGÍA Y ALERGOLOGÍA 2020; 2(4): 36