En el mayor estudio sobre diabetes insípida realizado hasta la fecha, se incluyeron más de 1.000 pacientes de todo el mundo. Las evaluaciones muestran que una gran parte de los afectados tienen carencias de atención y muchos sufren problemas psicológicos. Los resultados de la encuesta en línea se publicaron en la revista Lancet Endocrinology.
La hormona antidiurética (péptido arginina vasopresina, AVP) se produce en el hipotálamo, en el diencéfalo, y es liberada a la sangre por la neurohipófisis. En las personas sanas, asegura en los riñones que el organismo pierda la menor cantidad de agua posible. Sin embargo, esta interacción se desincroniza si se bebe demasiado: quienes consumen constantemente cantidades excesivas de líquido perjudican la función de formación de orina de los riñones, que ya no pueden retener las cantidades de líquido [1].
Clasificar correctamente el síndrome poliuria-polidipsia
La causa más común de poliuria y polidipsia es la presencia de una diabetes insípida central, en la que está alterada la liberación osmosensible de AVP (péptido arginina vasopresina) desde la neurohipófisis. Mucho menos común es la diabetes insípida renal o nefrogénica. Aquí, hay insensibilidad de la antidiuresis mediada por AVP en los riñones. La tercera causa posible es la polidipsia primaria. A menudo resulta de la supresión de la liberación de AVP por un aumento excesivo del consumo de líquidos [2].

Encuesta internacional en línea a gran escala
La encuesta en línea fue desarrollada por un equipo de expertos en estrecha colaboración con representantes de los pacientes. Mediante la participación directa de las personas afectadas por la enfermedad, se podría hacer especial hincapié en la investigación de los resultados relevantes para el paciente. El reclutamiento para participar en la encuesta se realizó a través de diversos canales con el apoyo de las organizaciones de pacientes. Entre el 23 de agosto de 2021 y el 7 de febrero de 2022, 1034 pacientes con diabetes insípida central participaron en la encuesta [3]. El 91% de los participantes eran adultos (rango de edad 34-54) y el 9% niños y jóvenes (rango de edad 6-15). El 47% de los participantes tenían una disfunción aislada de la pituitaria posterior y el 53% una disfunción combinada de la pituitaria anterior y posterior. Las principales causas fueron idiopáticas (30% de los casos) o la presencia de tumores y quistes (46% de los casos). El 26% de los 994 pacientes que recibieron tratamiento con desmopresina presentaron hiponatremia que condujo a la hospitalización. En los pacientes en los que se omitió o retrasó rutinariamente la administración de desmopresina -un agente antidiurético del grupo de los analgésicos ADH- para permitir la acuaresis intermitente, la prevalencia de hiponatremia fue significativamente menor (OR 0,55; IC 95%: 0,39-0,77; p=0,0006). De los 535 pacientes ingresados en el hospital por cualquier motivo médico, el 13% (IC del 95%; 0,10-0,16) no recibió desmopresina sin reposición de líquidos intravenosos. Según el autoinforme, los pacientes afectados presentaban síntomas de deshidratación. El 64% (n=660) de todos los participantes informaron de una reducción de la calidad de vida y el 36% (n=369) de cambios psicológicos que consideraban relacionados con la diabetes insípida central. El 80% (n=823) de los participantes se enfrentó a una situación en la que los profesionales sanitarios confundieron la diabetes insípida central con la diabetes mellitus. El 85% de los participantes se mostró a favor de cambiar el nombre de la enfermedad. Los nombres alternativos preferidos fueron “deficiencia de vasopresina” y “deficiencia de arginina vasopresina”.

La copeptina como marcador sustitutivo significativo de la vasopresina
Hoy en día se promueve un algoritmo basado en la copeptina (Fig. 1) como patrón oro para el diagnóstico diferencial del síndrome poliuria-polidipsia. La copeptina es un marcador sustitutivo estable y fiable de la vasopresina que refleja la concentración de vasopresina en la circulación. El desarrollo de los ensayos de copeptina supuso un gran avance en el diagnóstico diferencial del síndrome poliuria-polidipsia. Así pues, un valor de copeptina basal sin sed previa puede diagnosticar una diabetes insípida nefrogénica. Para distinguir la diabetes insípida central de la polidipsia primaria, se requiere una estimulación osmótica (con solución salina hipertónica) o no osmótica (con arginina). Ambas pruebas permiten distinguir entre estas entidades con una mayor fiabilidad diagnóstica que la prueba de la sed. Un diagnóstico correcto es un requisito previo para una terapia específica.
Literatura:
- “Beber por litros: una nueva prueba determina la causa de un equilibrio de líquidos patológicamente alterado”, Centro Médico Universitario de Leipzig, 02.08.2018.
- Chifu I, Fenske W: Nuevo estándar de diagnóstico en la diabetes insípida. Dtsch Med Wochenschr 2018; 143(24): 1739-1744.
- Atila C, et al: La diabetes insípida central desde la perspectiva del paciente: gestión, comorbilidades psicológicas y cambio de nombre de la afección: resultados de una encuesta internacional a través de Internet. Lancet Diabetes Endocrinol 2022; 10(10): 700-709.
- “La diabetes insípida desde la perspectiva del paciente”, Universidad de Basilea, 15.09.2022.
- Christ-Crain M: Copeptina: importancia en el diagnóstico del síndrome poliuria-polidipsia. J Clin Endocrinol Stoffw 2020; 13: 142-150.
PRÁCTICA GP 2023; 18(1): 32-33