En el congreso de la ESMO celebrado en Ámsterdam se realizó una evaluación de las posibilidades actuales en el tratamiento del cáncer de ovario recurrente. La terapia depende de la forma respectiva de recidiva y, por lo tanto, se dirige principalmente a mejorar los síntomas o a prolongar la supervivencia libre de progresión. En el futuro, los nuevos biomarcadores o agentes de imagen permitirán personalizar el enfoque farmacológico y, por tanto, mejorarlo significativamente en casos individuales.
(ag) El Prof. Ignace Vergote, de Lovaina, presentó los retos actuales en el campo del cáncer de ovario recurrente. En primer lugar, hay que precisar la definición de este sufrimiento:
- Si el intervalo libre de tratamiento desde la última dosis de platino >es de 12 meses, se denomina forma sensible al platino.
- Si este periodo es de 6-12 meses, se habla de una forma parcialmente sensible al platino.
- Si el periodo es de <6 meses, se denomina forma resistente al platino.
- Si el periodo es de <4 semanas, se denomina forma refractaria al platino.
“Los objetivos del tratamiento en el cáncer de ovario recurrente difieren según la sensibilidad al platino: en los tipos resistentes (0-6 meses), el objetivo principal es el alivio de los síntomas; en los tipos parcialmente sensibles, el objetivo principal es estabilizar la enfermedad y retrasar la progresión o prolongar la supervivencia libre de progresión. Estos objetivos son aún más importantes en los tipos sensibles al platino”, afirma el Prof. Vergote.
Cáncer de ovario sensible al platino
Según el Prof. Vergote, debe tenerse en cuenta lo siguiente en relación con el cáncer de ovario sensible al platino:
- La cirugía citorreductora secundaria puede estar indicada en pacientes seleccionadas (ensayos DESKTOP y GOG).
- La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha aprobado el bevacizumab para la forma sensible al platino.
- Se están estudiando otros fármacos antiangiogénicos, inhibidores de PARP, etc. en ensayos de fase II/III.
- Es necesario identificar urgentemente los predictores biológicos de la respuesta.
Cáncer de ovario resistente al platino
En la forma resistente al platino, es importante equilibrar bien la eficacia, la toxicidad y el calendario de los principios activos. En la actualidad, sin embargo, el campo de la investigación está experimentando un auge debido a diversas investigaciones sobre nuevas sustancias activas, que ya han producido algunos enfoques y resultados interesantes. Además de la inhibición de la angiogénesis, en el futuro se necesitarán fármacos para otras dianas moleculares que primero deberán confirmarse genéticamente o por imagen.
Enfoque personalizado
El Prof. Bradley J. Monk, MD, Arizona, habló sobre los biomarcadores: “Esta palabra se ha aplicado a menudo de forma inexacta. Un biomarcador es significativo si se ajusta a una indicación clínica importante, es reproducible y ofrece un beneficio concreto para el paciente individual o mejora la gestión. Esto también implica siempre una validación muy precisa del biomarcador y, por tanto, una buena comprensión de los mecanismos subyacentes.”
Existen biomarcadores pronósticos y predictivos. Los primeros se refieren a personas que ya están enfermas. Son útiles para predecir el resultado del tratamiento comparando a los pacientes con marcadores positivos con los negativos sin variar la intervención farmacológica. Los biomarcadores predictivos pueden utilizarse para predecir el resultado de un tratamiento específico dirigido en diferentes poblaciones. Esto puede ser útil para seleccionar una terapia para los pacientes de forma individual. Uno de estos tratamientos para el cáncer de ovario seroso, recurrente y sensible al platino es, por ejemplo, el tratamiento con inhibidores de PARP. El éxito del tratamiento parece depender parcialmente de la mutación BRCA.
Los agentes de imagen concomitantes también pueden predecir la respuesta, por ejemplo, la etarfolatida. Se une al receptor de folato, que se sobreexpresa en varios tipos de cáncer, a veces en el cáncer de ovario, e indica así la localización del tumor y la posible respuesta al tratamiento (por ejemplo, mediante vintafolida, actualmente en desarrollo).
Evolución actual
Hay varios fármacos prometedores en fase de desarrollo:
Vintafolida: La vintafolida tiene el estatus de medicamento huérfano y actualmente está siendo revisada en la UE en base a los datos del ensayo PRECEDENT. La solicitud de aprobación en EE.UU. se espera para 2015, basándose en el ensayo de fase III PROCEED actualmente en curso.
MK-1775: El MK-1775 es el único inhibidor de la cinasa WEE1 actualmente en desarrollo clínico. Se trata de una terapia oral que podría utilizarse en tumores deficientes en p53. El MK-1775 interfiere en el punto de control de daños en el ADN G2 (mediante la inhibición de WEE1), lo que hace que las células tumorales sean más vulnerables a los agentes quimioterapéuticos que causan daños en el ADN. En combinación con un agente quimioterapéutico destructor del ADN, esto parece permitir alcanzar tasas de respuesta prometedoras en el entorno refractario al platino.
Fuente: “¿Es la medicina personalizada una realidad para las pacientes con cáncer de ovario recurrente?”, Simposio Satélite de MSD en el Congreso de la ESMO, del 27 de septiembre al 1 de octubre de 2013, Ámsterdam.
InFo Oncología y Hematología 2014; 2(1): 37-38