El tratamiento en medicina popular de diversas enfermedades de la piel con corteza de roble tiene una larga tradición. Pero el remedio está desapareciendo cada vez más del repertorio terapéutico. Una orientación sobre la aplicación actual y las pruebas científicas.
Las especies de roble que pueden utilizarse con fines medicinales son el roble común (Quercus robur L.), el roble pubescente (Quercus pubescens) y el roble albar (Quercus petraea), tres especies del género Quercus de la familia de las Fagáceas (Fig. 1 ). Otro representante importante es el alcornoque (Quercus suber L.). La capa exterior de su corteza está formada por el corcho con el que se fabrican los conos de alcornoque.
El roble común es el más común en Europa. Sólo está ausente en zonas muy cálidas y secas del sur y el suroeste, y en zonas más frías del norte de Europa. Como necesita mucha luz, no se encuentra en bosques densos, sino sólo en lugares inundados de luz. El roble es muy demandado por su valiosa madera en la industria de la construcción y para la fabricación de barriles.
Ingredientes
En la corteza de roble se encuentra un 10-20% de taninos. Se trata principalmente de catequinas, o más exactamente de proantocianidinas oligoméricas. Estos llamados OPC son dímeros o trímeros de catequina. La Farmacopea Europea exige un contenido mínimo del 3% de catequinas y las calcula como pirogalol. Otros ingredientes son elagitaninos, flavanoelagitaninos, quercitol y triterpenos.
Medicina popular en uso
En Suiza no existen – aparte de los remedios antroposóficos – preparados de roble aprobados como medicamentos. En el pasado, la corteza de roble también era utilizada por la medicina ortodoxa, pero hoy en día sólo se emplea ocasionalmente en la medicina popular en forma de baños o cataplasmas. Aquí se utiliza para el tratamiento de erupciones cutáneas inflamatorias, no humectantes y de pequeña superficie. También puede afectar a las mucosas de la zona anal o genital y de la boca. Si las lesiones están en la zona de la boca, se hacen gárgaras o cepillados con el preparado de corteza de roble. A estas aplicaciones se les atribuye un efecto astringente, antipruriginoso y antiséptico (dosis recomendada en la caja).
Efecto
Debido a los ingredientes astringentes, cuyo efecto es provocado por el ácido tánico, se puede imaginar sin duda una eficacia en ciertas lesiones cutáneas, por ejemplo las hemorroides o las lesiones de la mucosa bucal. Los taninos pueden tener incluso un efecto antifúngico, como demostró un estudio farmacológico publicado recientemente [1]. Otro estudio sugiere que los taninos de la planta medicinal sanguinaria (Potentilla officinalis) tienen un efecto antiinflamatorio sobre la piel atópica en la prueba del eritema UV [2].
Sin embargo, no se ha podido encontrar ningún estudio clínico que demuestre un efecto documentado de los preparados a base de extracto de corteza de roble con respecto a problemas mayores. La corteza de roble parece tener muy poco interés para la investigación médica.
Estudios farmacológicos
Sin embargo, se han publicado algunos estudios farmacológicos.
Potencial antialérgico: Los taninos del roble inglés parecen tener cierta eficacia contra los mediadores de la alergia. Así se informó en un estudio farmacológico publicado en 2016 [3]. Para ello, el equipo de investigación separó cromatográficamente los taninos de alto peso molecular de una decocción de Quercus robur. Posteriormente, se midió fotométricamente la degranulación de las células basófilas activadas específicas de la alergia. Los taninos de roble de alto peso molecular mostraron una reducción dependiente de la dosis en la degranulación celular. Esto indica una posible actividad antialérgica de estos taninos, lo que en el mejor de los casos abre posibilidades para un tratamiento tópico de las alergias con extractos de corteza de roble.
Curación de heridas con Quercus infectoria: El quejigo (Quercus infectoria) se utiliza con fines medicinales en Asia desde hace mucho tiempo, especialmente para problemas de la piel y heridas. Un estudio farmacológico publicado en 2017 por un equipo de investigación tailandés documentó que los extractos de Quercus infectoria tienen actividad antibacteriana y antioxidante. Para ello, se crearon heridas en ratas diabéticas y se trataron con un preparado de vesícula biliar. En comparación con las ratas de control no tratadas, la cicatrización de las heridas mejoró significativamente en las ratas tratadas [4].
Alcornoque para el antienvejecimiento: En 2005 se realizó en Francia un estudio in vitro en humanos que arrojó un resultado prometedor en relación con los extractos de alcornoque [5]. Los 15 sujetos se aplicaron en el antebrazo una pomada con un 3% de extracto de alcornoque o un placebo. Después de una y dos horas, se examinó el estado de la piel. En el grupo verum, algunos sujetos mostraron una disminución significativa de la aspereza de la piel al cabo de una hora. Al cabo de dos horas, este cambio cutáneo significativo se observaba en el 78,6%. Este estudio sugiere que el extracto de alcornoque puede aumentar la tensión y la tersura de la piel, lo que podría utilizarse en productos antienvejecimiento para el cuidado de la piel. Y de hecho, existen productos cosméticos que aprovechan esta propiedad tensora de la piel del alcornoque.
Resumen
Algunas especies de roble tienen una larga tradición de medicina popular. Los preparados de corteza de roble se utilizan contra diversos problemas de la piel y las mucosas en forma de baños, cepillados, etc. En Suiza, aparte de los productos antroposóficos, no existen preparados de corteza de roble que cuenten con la aprobación de Swissmedic. No existen estudios clínicos que demuestren su eficacia dermatológica. Por otra parte, estudios farmacológicos y un estudio in vitro en humanos concluyeron que la corteza de roble abre posibilidades en la cicatrización de heridas, el control de alergias y el estiramiento de la piel.
Quienes deseen recomendar el uso de preparados de corteza de roble en su práctica diaria o reciban consultas de pacientes a este respecto pueden remitirlos a una farmacia que disponga de corteza de roble triturada en stock y pueda explicarles el preparado.
Literatura:
- de Freitas ALD, et al.: Proanthocyanidin polymeric tannins from Stryphnodendron adstringens are effective against Candida spp. isolates and for vaginal candidiasis treatment.
- J Ethnopharmacol 2018; 216: 184-190.
- Hoffmann J, et al.: Los taninos de Potentilla officinalis muestran efectos antiinflamatorios en la prueba del eritema UV y en la piel atópica. J Dtsch Dermatol Ges 2016; 14(9): 917-922.
- Lorenz P, et al.: Los constituyentes de la corteza de roble (Quercus robur L.) inhiben la degranulación y la liberación de mediadores alérgicos de basófilos y mastocitos in vitro. J Enthnopharmacol 2016; 194: 642-650.
- Chokpaisarn J, et al: Actividad potencial de cicatrización de heridas de la formulación de Quercus infectoria en ratas diabéticas. PeerJ 2017; 5: e3608. doi: 10.7717/peerj.3608.
- Coquet C, et al.: El extracto de corcho Quercus suber muestra un efecto tensor y alisador sobre la piel humana: un estudio in vivo. Drugs Exp Clin Res 2005; 31(3): 89-99.
PRÁCTICA GP 2018; 13(11): 4-5