El cáncer de estómago suele aparecer en la edad adulta media y avanzada. Más del 90% de los tumores malignos del estómago son adenocarcinomas; los linfomas gástricos localizados y los leiomiosarcomas son menos frecuentes. Mediante la IRM se pueden diferenciar distintas formas morfológicas de adenocarcinoma. La TC apenas tiene importancia a efectos diagnósticos, pero se utiliza a menudo para la estadificación de tumores.
Ya se han tratado en esta serie numerosos cambios patológicos como causas de disfagia en la consulta 2022. Además de la localización de lesiones ocupantes de espacio con disfagia consecutiva en la zona de la hipofaringe, la laringe y el esófago, así como de procesos que obstruyen externamente el paso de los alimentos, el presente artículo se centra en el carcinoma gástrico.
La incidencia y la letalidad del carcinoma gástrico han disminuido en los últimos años. La tasa de nuevos casos al año en Alemania en 2007 fue de 19 400, y la proporción de hombres de 11 200 [7]. El 85% de las neoplasias eran adenocarcinomas. Aunque se encuentra en la sección media de los órganos digestivos, las alteraciones tumorales del estómago pueden tener un efecto obstructivo sobre el paso de los alimentos y provocar disfagia. El cuadro 1 enumera los diferentes síntomas [1] que pueden derivarse de un carcinoma gástrico.

En la fase inicial del carcinoma gástrico, no hay molestias o éstas son leves y poco características. A menudo se ignoran o se interpretan erróneamente como intolerancias alimentarias inofensivas. El carcinoma gástrico se observa con frecuencia en la edad adulta media y avanzada [5]. La forma superficial es bastante rara. Las enfermedades crónicas preexistentes pueden favorecer el desarrollo de malignidad [2], como la anemia perniciosa [3] y la enfermedad de Menetrier [4]. Se trata de una gastritis atrófica con anemia megaloblástica o anemia por déficit de vitamina B12. La enfermedad de Menetrier es una gastritis de pliegues gigantes. Ocasionalmente se producen úlceras gástricas. El diagnóstico se realiza histológicamente en ambos casos.
El adenocarcinoma es el tipo de tejido más frecuente [6]. En este contexto, las infecciones por Helicobacter pylori también han demostrado ser un factor favorable.
Los rayos X no desempeñan ningún papel en el diagnóstico del carcinoma gástrico. En el pasado, el examen de doble contraste del estómago en hipotensión era la principal exploración por imagen para detectar procesos tumorales y trastornos funcionales del estómago. Tras la introducción de la endoscopia, este método de diagnóstico por imagen ya no desempeña ningún papel. En principio, la endoscopia se considera la herramienta diagnóstica de elección.
Desde el punto de vista ecográfico, es posible identificar masas en la pared del estómago en condiciones acústicas óptimas después de que el estómago se haya llenado de líquido. Las cocardias grandes y constantes son sospechosas y la palpación controlada por ecografía muestra poca deformabilidad del tumor [9].
Los exámenes de tomografía computarizada rara vez se solicitan principalmente para el diagnóstico del carcinoma gástrico. En la estadificación, el método ha demostrado su eficacia para verificar el crecimiento tumoral mural y las metástasis en ganglios linfáticos u órganos. En el estómago, que está bien lleno de agua oral, los engrosamientos de la pared con más de 4 mm son sospechosos de tumor, nodulares o de contorno irregular [8].
Se pueden diferenciar cuatro formas morfológicas de adenocarcinoma mediante resonancia magnética (resumen 2). Los tumores son isointensos respecto a la pared gástrica en T1w, ligeramente hiperintensos en T2w y muestran un claro realce de la señal tras la administración de contraste [10].

Estudios de caso
El informe del primer caso muestra un adenocarcinoma de estómago confirmado histológicamente en una paciente de 72 años (Fig. 1A y B) con dolor abdominal superior, náuseas, pérdida de peso y pérdida de apetito. Las filias pulmonares pudieron excluirse durante la estadificación (Fig. 1C).

En el caso clínico 2, se detectó un carcinoma gástrico en el cuerpo distal y el píloro en la TC (Fig. 2A a C). La paciente, de 51 años, presentaba dolor abdominal medio, fatiga, cansancio y vómitos. Histológicamente, también se confirmó un carcinoma gástrico.

El caso 3 muestra que la TC tiene una gran sensibilidad pero una menor especificidad en el diagnóstico de los tumores de la mucosa gástrica. En el caso del paciente de 72 años con carcinoma de próstata, también se observó un engrosamiento conspicuo de la pared del estómago durante la estadificación (fig. 3 ), que, sin embargo, pudo asignarse histológicamente a una gastritis crónica.

Mensajes para llevarse a casa
- El adenocarcinoma es el tumor maligno más frecuente del estómago.
- La incidencia ha disminuido en los últimos años.
- Esta neoplasia es ligeramente más frecuente en hombres que en mujeres,
principalmente en la etapa media de la vida. - El método de diagnóstico de elección es la endoscopia, que también incluye una
es posible un respaldo histológico. - Los procedimientos de imagen transversal tienen un gran valor en la estadificación.
Literatura:
- Ajani JA, et al: Adenocarcinoma gástrico. Nat Rev Dis Primers 2017; 3: 17036.
- Arfaoui D, et al: Perfil epidemiológico del carcinoma gástrico: estudio de 140 casos. Tunis Med 2006; 84(5): 301-304.
- Burgener FA, et al: Diagnóstico diferencial en resonancia magnética. Georg Thieme Verlag: Stuttgart, Nueva York, 2002; 555.
- Dietel M, Suttorp N, Zeitz M (eds.): Medicina interna de Harrison. Volumen 1. 17ª edición. ABW Wissenschaftsverlag GmbH: Berlín 2009; 709.
- DocCheck Flexikon, https://flexikon.doccheck.com/de/Perniziöse_
Anemia, (última consulta: 14.12.2022) - Medicoconsult, www.medicoconsult.de/morbus_menetrier, (último acceso 141.12.2022)
- Prokop M, Galanski M (Eds): Tomografía computarizada del cuerpo. Georg Thieme Verlag: Stuttgart, Nueva York 2003; 559-561.
- Rebai W, et al: Adenocarcinoma gástrico precoz. Tunis Med 2010: 88(1): 1-4.
- Stahl M: Cáncer gástrico: síntomas, www.krebsgesellschaft.de/basis-informationen-krebs-allgemeine-informationen.html,
(última llamada 14.12.2022) - Struve C: Sonografía del abdomen. 4ª edición revisada y ampliada. Urban & Schwarzenberg: Múnich, Viena, Baltimore 1991; 87.
PRÁCTICA GP 2023: 18(1): 40-42