La enfermedad de las vías respiratorias pequeñas (EPM) es una característica central de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Más de la mitad de los pacientes asmáticos también la padecen. Un equipo de autores analizó estudios recientes sobre la relación entre el TAE y el enfisema.
Las vías respiratorias pequeñas y más pequeñas por definición tienen un diámetro <2 mm y se originan en la 4ª-13ª generación de ramificación de las vías respiratorias, con la tráquea como 1ª generación que se extiende hasta el alvéolo como 23ª generación. Sin embargo, normalmente sólo se dan hasta la octava generación. Se calcula que alrededor del 20% de las pequeñas vías respiratorias de menos de 2 mm de diámetro tienen bronquios con elementos cartilaginosos en sus paredes, el resto son bronquiolos o ductus alveolaris.
Relación entre el TAE y el enfisema
El enfisema centrilobular está fuertemente asociado al tabaquismo crónico. Ataca a los lobulillos pulmonares secundarios, que son unidades irregulares y poliédricas de la estructura pulmonar (Fig. 1). Los lobulillos pulmonares secundarios contienen entre 3 y 10 acinos, como escriben el Dr. Andrew Higham, de la Universidad de Manchester, y sus colegas en su artículo de revisión [1]. Cada acino incluye los bronquiolos respiratorios, los conductos alveolares y los espacios alveolares. La destrucción enfisematosa, que suele ser consecuencia del tabaquismo, se origina en el centro del lobulillo. En el centro se sitúan los bronquiolos respiratorios, afectados principalmente por el enfisema centrilobular. En cambio, el enfisema panlobular ataca todas las estructuras, desde los alvéolos distales hasta los bronquiolos de las vías respiratorias. El enfisema paraseptal afecta a los alvéolos y a los ducti alveolaris, pero no a las estructuras proximales.
¿Cómo se relaciona el remodelado de las vías respiratorias pequeñas, especialmente la fibrosis, con el enfisema? Por un lado, hay un engrosamiento del tejido, pero por otro, hay una pérdida de tejido. Como Higham et al. En un estudio [2], se investigó la expresión de 54 genes de reparación tisular en las vías respiratorias pequeñas y el parénquima circundante mediante microdisecciones por captura con láser. Lo que se encontró fue una expresión diferencial de estos genes entre las dos zonas, con una expresión que favorecía la degradación del parénquima que rodea las vías respiratorias pequeñas. Los autores del estudio sugieren que algunas pequeñas vías respiratorias se destruyen de forma similar al parénquima, mientras que otras presentan un perfil engrosado.
Los estudios apoyan la conexión
Varios estudios recientes han demostrado una reducción del número total de bronquiolos terminales y respiratorios de primer orden (de transición) en pacientes con EPOC en comparación con los controles mediante tomografía microcomputarizada. El 90% de los bronquiolos terminales estaban obliterados en los pulmones con EPOC en estadio IV. En los pacientes GOLD 1, la reducción en los bronquiolos terminales y respiratorios fue del 29 y el 41%, respectivamente, y en los pacientes GOLD 2, del 40 y el 53%, respectivamente. Las pequeñas vías respiratorias restantes presentaban paredes engrosadas y lúmenes estrechos causados por obstrucciones mucoides y depósitos colágenos. La pérdida y remodelación de los bronquiolos terminales y transitorios en el tejido pulmonar no afectado por el enfisema proporciona más pruebas de que el DUA precede a las lesiones enfisematosas.
El TAE, según el Dr. Higham y sus colegas, está presente en todas las fases de la EPOC. En la actualidad, cada vez se tiene más en cuenta el hecho de que también es de gran importancia en las primeras fases de la enfermedad. Las nuevas investigaciones y los hallazgos resultantes permiten comprender mejor la progresión de la enfermedad de las vías respiratorias pequeñas, así como la importancia de las exacerbaciones en la promoción de los procesos inflamatorios y de remodelación asociados a la enfermedad de las vías respiratorias pequeñas. El TAE parece ser un precursor del desarrollo del enfisema, y las estrategias terapéuticas dirigidas a las vías respiratorias pequeñas en la EPOC podrían reducir la tasa de progresión del enfisema. Basándose en esto, los investigadores aconsejan el uso de la orientación farmacológica más temprano que tarde en el desarrollo de la EPOC.
Literatura:
- Higham A, et al: La patología de la enfermedad de las vías respiratorias pequeñas en la EPOC: aspectos históricos y direcciones futuras. Investigación respiratoria 2019; 20: 49
(https://doi.org/10.1186/s12931-019-1017-y) - Gosselink JV, Hayashi S, Elliott WM, et al: Expresión diferencial de los genes de reparación tisular en la patogénesis de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Am J Respir Crit Care Med. 2010; 181(12): 1329-1335.
InFo NEUMOLOGÍA Y ALERGOLOGÍA 2019; 1(2): 28