Uno de los principales objetivos de la cirugía cardiaca moderna es reducir los traumatismos quirúrgicos. Por ello, en los últimos años se ha investigado intensamente sobre el desarrollo de medidas quirúrgicas. El resultado fue la posibilidad de nuevos enfoques, desarrollos en perfusión y anestesia. Una visión general de las posibilidades actuales.
Una parte importante de los avances en cirugía cardiaca es la capacidad de ser lo menos invasiva posible. Estos métodos tienen un gran impacto en la calidad de los resultados a largo plazo, así como en la convalecencia de los pacientes, explicó el Prof. Dr. med. Omer Dzemali, Zúrich. El actual abordaje estándar de esternotomía media permite acceder al corazón así como a los vasos cercanos al corazón, lo que lo hace favorable para todas las operaciones cardiacas. Por regla general, el esternón también vuelve a curarse de forma estable en dos o tres meses. Sin embargo, las desventajas son obvias: este método no sólo es cosméticamente poco favorecedor. La gran superficie de la herida puede provocar fuertes dolores tras la operación. Además, existe un riesgo de mayor pérdida de sangre con alteración de la coagulación, así como de infecciones y alteración de la cicatrización ósea, especialmente en pacientes con osteoporosis.
Por lo tanto, para procedimientos como la sustitución de la raíz, la ascendente y la hemiba o la disección de tipo A sin complicaciones, debería recurrirse cada vez más a la esternotomía superior parcial. En caso de sustitución valvular, tumores cardíacos, oclusión del tabique interauricular o en cirugía del ritmo, también puede recurrirse a la minitoractomía lateral derecha. La minitoracotomía lateral izquierda es adecuada, por ejemplo, para la TAVI transapical o la MKE Tendyne.
Centrarse en la perfusión
La perfusión es una parte importante de la cirugía cardiaca, pero también presenta muchos retos. Un uso elevado de tecnología con mucho material extraño conlleva el riesgo de complicaciones. Sin embargo, se han realizado progresos significativos en este ámbito. Los módulos de control y supervisión no sólo pueden consultar una serie de valores diferentes, sino también procesarlos y evaluarlos en línea. Mientras tanto, durante el tratamiento pueden realizarse la saturación regional de oxígeno, la monitorización en línea de los gases sanguíneos, la medición continua no invasiva de la SAO2, la SVO2, así como de la Hb y la monitorización de la actividad de las microburbujas. Además, el ECMO podría hacerse significativamente más pequeño para que también pueda utilizarse de forma móvil in situ y esté disponible para diferentes opciones de transporte.
La vía rápida como medio de anestesia
Con la ayuda del Fasttrack, una gran proporción de pacientes mínimamente invasivos pueden ser tratados en cirugía cardiaca. Esto incluye la administración de dosis bajas de anestésicos basados en opiáceos y la extubación precoz. Alrededor del 80% de los pacientes son extubados en el quirófano y luego trasladados a la unidad de cuidados intensivos. La movilización rápida también acorta el tiempo de estancia en la unidad de cuidados intensivos, por lo que los pacientes pueden ser trasladados a la sala normal con mayor rapidez y también puede reducirse el tiempo total de observación. El beneficio económico se da tanto en el ámbito de las finanzas como en el de los recursos, resumió el experto.
El trabajo en equipo también puede evitar complicaciones. Entre ellas se incluyen la gestión de la temperatura, la gestión intraoperatoria de fluidos y volúmenes, la gestión de transfusiones y coagulación, la analgesia postoperatoria y la prevención del delirio.
La cooperación interdisciplinar cobra más importancia
La psicocardiología es una nueva disciplina que también está adquiriendo cada vez más importancia en los hospitales. El objetivo es profesionalizar la atención psicológica a los pacientes. Esto incluye, por ejemplo, la atención psicocardiológica pre y postoperatoria de los afectados. En un proyecto de investigación se pretende detectar la relación entre los factores psicológicos y el curso de la cirugía cardiaca, identificar los factores de riesgo psicológicos y establecer una comprensión precisa de los mecanismos mediadores.
Congreso: Actualización en cardiología del FomF
CARDIOVASC 2022; 21(1): 31